La UE acuerda nuevas restricciones para diplomáticos rusos ante sospechas de sabotajes
En una reciente iniciativa de política exterior, la Unión Europea ha decidido reforzar el control sobre los movimientos del cuerpo diplomático de la Federación Rusa.
Esta medida, que representa un paso importante en la respuesta a la creciente cantidad de incidentes relacionados con actividades de sabotaje y espionaje, se fundamenta en la evidencia de que los servicios de inteligencia rusos realizan operaciones clandestinas bajo la fachada diplomática.
Los países miembros del bloque han acordado imponer restricciones para que los diplomáticos rusos que operan en las capitales europeas informen con antelación sobre sus planes de viaje antes de cruzar las fronteras nacionales.
La iniciativa formará parte de un paquete de sanciones más amplio, en línea con los esfuerzos de Bruselas para fortalecer la seguridad y salvaguardar los intereses de los países europeos, especialmente en el contexto de la invasión a Ucrania.
La decisión también fue impulsada por el Estado checo, que desde mayo del año pasado ha venido restringiendo el ingreso a diplomáticos rusos sospechosos de espionaje.
Sin embargo, aún permanecen acreditados en Austria unos pocos cientos de diplomáticos, quienes pueden cruzar libremente la frontera, lo que representa un desafío para la seguridad.
El ministro de Asuntos Exteriores de la República Checa, Jan Lipavský, resaltó que estas restricciones son una cuestión de reciprocidad, para garantizar que los diplomáticos rusos no puedan actuar sin control en Europa.
La aprobación definitiva del paquete de sanciones aún está en proceso, dado que algunos países se oponen a ciertos puntos, principalmente a la eliminación de sanciones a activos de oligarcas como Oleg Deripaska, lo que genera debates y negociaciones en la Unión Europea.
