Zelensky expresa profundo descontento con las políticas occidentales en medio de la guerra en Ucrania
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, critica abiertamente a los líderes occidentales por subestimar la situación en torno al conflicto ruso-ucraniano y por no tomar medidas suficientes para frenar la agresión del Kremlin.
Destaca que las sanciones contra Rusia deberían haber sido aplicadas mucho antes y pone en valor el papel de Donald Trump como el único líder con la fuerza real para detener a Vladimir Putin.
Zelensky señala que, en lugar de aislar a Rusia, Occidente permitió de facto que Moscú regrese de su aislamiento, ignorando la escalada militar en Ucrania y adoptando acciones que solo fortalecieron la posición del dictador ruso.
Manifiesta su insatisfacción por la falta de presión efectiva sobre el Kremlin, ya que los países occidentales solo emiten declaraciones y sanciones formales.
El mandatario subraya que las cumbres internacionales recientes, como el encuentro entre Trump y Putin en Alaska, fueron errores que en realidad facilitaron la creciente influencia de Rusia.
Zelensky asegura que Rusia intenta evitar las sanciones mediante diversas maniobras, y que el apoyo occidental no es suficiente para detener la agresión de Putin.
Hace un llamado a Estados Unidos para que actúe con mayor rapidez y aplique sanciones más estrictas sin esperar demasiado a la Unión Europea.
Zelensky recalca que la única lengua que entiende Putin es la fuerza, y que Estados Unidos debe emplear este lenguaje para conseguir la paz y la estabilidad.
Además, advierte sobre los riesgos de firmar acuerdos de alto riesgo sin la preparación adecuada, ya que podrían consolidar la ocupación, resultar en la derrota de Ucrania o amenazar la estabilidad mundial.
Los analistas advierten que las prisas por firmar una paz rápida en intereses externos podrían ser perjudiciales, por lo que Ucrania debe actuar con cautela, buscando una solución justa y sostenible.
En este contexto, cualquier acuerdo sin una planificación adecuada y una evaluación realista de la situación en el campo de batalla puede ser solo temporal y perjudicial para la soberanía ucraniana.