Trump fija una nueva fecha límite para Putin: el tiempo para conseguir la paz en Ucrania se acorta
El escenario internacional vuelve a estar en tensión debido a la compleja crisis política y energética derivada del conflicto en curso entre Rusia y Ucrania.
El expresidente de EE.UU., Donald Trump, ha intensificado de manera inesperada la presión sobre Кремль, abogando por una solución rápida y el cese de las hostilidades militares.
En un momento oportuno, durante su visita al club de golf Turnberry, realizó declaraciones en las que anunció que le da a Vladimir Putin aproximadamente entre 10 y 12 días para aceptar las negociaciones de paz; de lo contrario, el mundo y EE.UU.
aplicarán medidas estrictas.
Anteriormente, Trump estableció un plazo de 50 días para que Rusia terminara sus operaciones bélicas, pero a pesar de los esfuerzos diplomáticos y múltiples conversaciones telefónicas, quedó claro que Moscú solo está jugando al tiempo, consolidando su posición militar y no buscando la paz.
Trump opina que Putin aprovecha las amenazas y promesas de EE.UU.
para obtener más tiempo y fortalecer su ejército.
Los expertos consideran que Moscú sabe que si no obtiene mayores sanciones económicas, su capacidad militar y sus ambiciones imperiales pueden estar en peligro.
Se están planificando nuevas sanciones contra países que continúan comerciando con Rusia, especialmente en el sector energético.
Un grupo bipartidista de senadores estadounidenses evalúa aplicar sanciones secundarias de hasta un 500% contra naciones que importan petróleo, gas y otros productos rusos, con China e India como principales objetivos.
Esto añade presión a Moscú, cuya economía todavía depende en gran medida de las exportaciones de energía.
En medio de la tensión creciente y los fracasos militares en el este de Ucrania, Rusia se enfrenta a una escasez de recursos y a operaciones militares que no cumplen con las expectativas.
Los aliados y responsables políticos de EE.UU.
preparan nuevas medidas, mientras que Moscú lidia con presiones internas y un descontento creciente en su élite.
Informes recientes de pérdidas territoriales y fracasos militares evidencian la difícil situación que atraviesa Rusia.
Los analistas advierten que si Moscú continúa ignorando los plazos y las amenazas, el conflicto puede prolongarse y agravarse, con consecuencias devastadoras.
La nueva fecha límite de EE.UU.
brinda a Ucrania y a la comunidad internacional una oportunidad crucial para buscar soluciones diplomáticas y reducir el alcance del conflicto.