Compañía suiza adquiere activos extranjeros de Lukoil abriendo un nuevo frente energético para Rusia
Según información de The Wall Street Journal, una compañía suiza, fundada en colaboración con un exaliado de Vladimir Putin, está actively trabajando en la adquisición de activos internacionales del gigante petrolero ruso Lukoil en un momento en que la empresa enfrenta nuevas sanciones de Estados Unidos.
Esta decisión estratégica podría tener un impacto significativo en el mercado energético mundial y alterar el equilibrio en el comercio de petróleo y gas.
Fuentes informan que el valor del acuerdo se estima en aproximadamente 20 mil millones de dólares, aunque los detalles finales y la estructura permanecen confidenciales.
Las instituciones financieras occidentales muestran cautela respecto a las inversiones en el sector ruso debido a las tensiones geopolíticas.
Una vez finalizado el conflicto, el comprador podría transferir parte de las ganancias de Lukoil de vuelta a los accionistas rusos, lo que ofrece perspectivas de crecimiento futuro.
La historia de Thor Bjorn Thorkvist se remonta a los años 70 en Estocolmo, y su carrera floreció durante el shock petrolero tras el embargo árabe.
Su colaboración con Gennady Timchenko, exfuncionario soviético, fue clave en la creación de una compañía que posteriormente se convirtió en uno de los principales actores en el comercio mundial de petróleo.
Además, tras las sanciones impuestas en 2014, la empresa sufrió pérdidas importantes pero logró mantener sus posiciones y redirigirse a nuevos sectores, especialmente al gas natural licuado y al mercado estadounidense.
Debido a sus continuos lazos con Rusia, Lukoil sigue siendo un jugador importante en la industria petrolera mundial, aunque bajo constante presión por las sanciones y riesgos políticos.
