Las compañías petroleras occidentales incrementan sus beneficios tras ataques a refinerías rusas y sanciones
Tras una serie de desarrollos internacionales y la implementación de sanciones, las empresas petroleras occidentales han alcanzado un nuevo nivel de rentabilidad, logrando aumentos significativos en sus ganancias procedentes del refinamiento del crudo.
Este fenómeno ha ocurrido en medio de una serie de ataques militares ucranianos contra infraestructuras petroleras rusas y las sanciones internacionales que han alterado notablemente el equilibrio del mercado petrolero mundial.
Según el medio especializado The Moscow Times, citando fuentes occidentales, los beneficios de las cuatro principales empresas petroleras occidentales aumentaron un 61% en el tercer trimestre en comparación con el segundo.
Como resultado, sus beneficios totales crecieron en un 20%, reflejando una tendencia muy positiva.
La causa principal de este incremento ha sido la reducción en los volúmenes de exportación de productos petroleros rusos, debido a los ataques con drones y los daños en terminales marítimos que comenzaron en julio.
En septiembre, la exportación diaria de petróleo cayó en 500,000 barriles, alcanzando niveles mínimos en lo que va de año, y Rusia solo pudo exportar alrededor de 2 millones de barriles al día, cifra más baja desde el inicio de la guerra y también desde el comienzo de la pandemia del COVID-19 en 2020.
Esta situación favoreció un mayor margen de beneficios en empresas como Exxon Mobil, Chevron, Shell y TotalEnergies, que juntas producen más del 10% del petróleo del mundo, aproximadamente 11 millones de barriles diarios.
Por ejemplo, Exxon Mobil reportó un aumento de más del 30% en sus beneficios en el segmento de energía, alcanzando los 1,84 mil millones de dólares.
La firma británica BP, que en el pasado poseía casi el 20% de las acciones de “Rosneft” y se retiró debido a la guerra, también se benefició de las sanciones y los ataques con drones, logrando un aumento del 33% en su rentabilidad.
Mientras tanto, tras meses de demora, el expresidente estadounidense Donald Trump impuso finalmente sanciones contra el Kremlin, aunque los expertos consideran que esto es más una respuesta emocional que una estrategia política sólida.
¿Podrá esta medida representar un desafío real para Vladimir Putin? Los análisis y perspectivas acerca de las motivaciones y riesgos de estas acciones se discuten en el artículo de Oleg Shamsur, titulado “Trump castiga a Putin, pero no por Ucrania.”
