EE.UU. impone amplias sanciones contra los gigantes petroleros rusos para aumentar la presión sobre el Kremlin
Estados Unidos ha avanzado decisivamente en su estrategia para limitar la influencia económica de Rusia, imponiendo nuevas sanciones contra las dos mayores empresas petroleras y de gas rusas: “Rosneft” y “Lukoil”.
Estas medidas buscan incrementar la presión sobre el Kremlin, restringiendo su capacidad para financiar operaciones militares y mantener la economía del país.
Según el Departamento del Tesoro de EE.UU., estas sanciones afectan no solo a las empresas principales sino también a sus filiales.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, resaltó que el gobierno continuará actuando con firmeza y, si fuera necesario, aplicará sanciones adicionales para respaldar los esfuerzos internacionales por detener la agresión rusa.
Se hace un llamado a los socios internacionales para que se unan a estas sanciones y unan esfuerzos contra la maquinaria militar de Moscú.
Las empresas con mayor impacto en esta medida son “Rosneft”, dedicada a la exploración, extracción, refinamiento y comercio de petróleo y gas, y “Lukoil”, que realiza operaciones similares tanto en Rusia como en otros países.
Ambas compañías y sus subsidiarias—que tienen una participación superior al 50% en sus activos—son automáticamente objeto de bloqueo, independientemente de si aparecen o no en la lista oficial de sanciones.
El Departamento del Tesoro renueva su compromiso de fortalecer el aislamiento económico de Rusia y solicita a la comunidad internacional que refuerce la presión para lograr una solución pacífica a este conflicto.