Las tensiones diplomáticas persisten mientras avanzan los preparativos para la cumbre entre Trump y Putin, a pesar de las especulaciones mediáticas
Los preparativos para la cumbre de alto nivel entre el expresidente de Estados Unidos Donald Trump y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, continúan en marcha, pese a las informaciones difundidas por los medios occidentales que sugieren que el evento podría ser cancelado.
El enviado especial ruso, Kiril Dmitriyev, afirmó que todas las fases de la preparación de la cumbre siguen su curso sin interrupciones y negó que los trabajos hayan sido detenidos.
Asegura que los esfuerzos de ciertos medios por distorsionar y presentar un panorama negativo solo sirven para minar las perspectivas del encuentro.
Por su parte, en Estados Unidos, Trump manifestó que aún no se ha tomado una decisión definitiva sobre la reunión, debido a que desea evitar perder tiempo en acciones infructuosas.
Aunque se han cerrado importantes acuerdos internacionales, la prioridad — finalizar la guerra en curso — todavía no se ha alcanzado.
Se espera que las próximas semanas aclaren si la cumbre tendrá lugar, en medio de retrasos provocados por la cancelación en Moscú de negociaciones entre el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergey Lavrov, y el secretario de Estado estadounidense, Mark R.
Rubio.
Expertos advierten que, en el peor de los casos, esta reunión podría convertirse en uno de los momentos más peligrosos para Ucrania desde el inicio del conflicto, atrayendo la atención de la comunidad internacional y exigiendo una evaluación cuidadosa de las posibles repercusiones.
