China da un avance estratégico en modernización militar con la incorporación del nuevo portaviones “Fujian”
China ha puesto en servicio oficialmente su portaviones más moderno, el “Fujian”, tras rigurosas pruebas marítimas que se han prolongado durante varios meses, asegurando un paso decisivo en su desarrollo militar naval.
Este acontecimiento refleja la ambición del país de ampliar su influencia marítima y fortalecer su capacidad bélica en la región y en el escenario internacional.
Los medios estatales informan que la incorporación de esta nave supone una nueva etapa en la modernización de las fuerzas armadas chinas, permitiendo exhibir una mayor presencia en los mares del mundo.
Analistas de seguridad señalan que el “Fujian” potenciará la capacidad de proyección militar china en zonas de conflicto regional y más allá, fortaleciendo la autonomía de su flota y permitiendo operaciones prolongadas en alta mar.
El presidente chino Xi Jinping participó en la ceremonia de puesta en marcha, inspeccionando personalmente la embarcación, en señal de la importancia que Beijing otorga a este avance.
El nuevo portaviones cuenta con una cubierta plana y catapultas electromagnéticas, lo que lo hace más poderoso y avanzado que los modelos anteriores.
Esto también significa que podrá desplegar más aviones y de mayor peso, incrementando su capacidad de combate.
Se estima que, tras unos meses de ajustes y pruebas adicionales, el portaviones estará completamente operativo, aunque aún enfrenta desafíos relativos a su autonomía y recursos técnicos, pues funciona con un motor diésel que limita su alcance comparado con los portaaviones nucleares estadounidenses.
La vigilancia del Pentágono advierte que “Fujian” fortalecerá la presencia militar china en regiones estratégicas y podría influir en futuras acciones relacionadas con Taiwán.
En definitiva, su lanzamiento supone un paso importante en la política militar y en la estrategia de China para afirmar su presencia global en el mar.