Corea del Norte intensifica pruebas militares en plena temporada de visitas internacionales y cumbres diplomáticas
Mientras la comunidad internacional observa con atención las recientes visitas diplomáticas y reuniones mundiales, Corea del Norte continúa demostrando su poder militar a través de una serie de pruebas de misiles llevadas a cabo en rápida sucesión.
Los eventos recientes evidencian una escalada de tensiones en la península coreana y un marcado esfuerzo por parte de Pyongyang de exhibir su capacidad de respuesta militar frente a amenazas externas.
En los últimos días, aproximadamente diez cohetes fueron lanzados desde sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS) en dirección al Mar Amarillo, apenas una hora antes del arribo del Secretario de Defensa de Estados Unidos, P.
Ghete, al área desmilitarizada entre Corea del Norte y Corea del Sur.
La evaluación de estos lanzamientos continúa, pero ya se sabe que no infringen las resoluciones de la ONU, aunque sus sistemas de 240 mm tienen la capacidad de impactar en Seúl y en las regiones circundantes.
Además, desde el 1 de noviembre, Corea del Norte realizó otros diez lanzamientos, coincidiendo con encuentros entre el presidente surcoreano Lee Jae-myeon y el líder chino Xi Jinping durante la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático en Kyeongju.
Autoridades militares aseguraron que mantienen una vigilancia estrecha sobre las actividades norcoreanas y refuerzan su alianza defensiva con EE.UU.
para responder ante cualquier posible amenaza.
Aunque estos lanzamientos no violan las normativas internacionales, sus sistemas, particularmente los MLRS de 240 mm, representan una amenaza para Seúl, generando preocupación en toda la región.
Paralelamente, Corea del Norte anunció el exitoso ensayo de un nuevo arma hipersónica, demostrando así su capacidad militar en contra de posibles adversarios.
Los ensayos tuvieron lugar al norte de Pionyang, donde los proyectiles impactaron en objetivos ubicados en la provincia de Hwanghae, aunque los detalles técnicos siguen siendo confidenciales.
Además, en vísperas de la próxima visita del presidente estadounidense Donald Trump, Corea del Norte habría preparado varias pruebas con misiles balísticos, que recorrieron alrededor de 350 km y probablemente cayeron en tierra firme.
Las fuerzas militares surcoreanas confirmaron que monitorearon los lanzamientos y compartieron información con EE.UU.
y Japón, en medio de una creciente tensión regional que aumenta el riesgo de conflicto en la zona.