Las autoridades de ocupación rusas en Berdyansk integran completamente la preparación militar en los programas educativos de la juventud
En la ciudad de Berdyansk, ocupada por fuerzas rusas, las autoridades de ocupación manipulan activamente el sistema educativo para cumplir con sus objetivos militares y propagandísticos.
Según informes del Centro de Resistencia Nacional, han creado un grupo pseudo-voluntario denominado «Bars-85» conformado por estudiantes del colegio médico local, presentado oficialmente como un «escuadrón de rescate» para emergencias.
Sin embargo, la verdadera intención es preparar a los jóvenes ucranianos para participar en operaciones militares como personal sanitario, ayudantes y técnicos para las fuerzas armadas rusas.
La denominación «Bars-85» hace referencia al «Detachment of Volunteer Cossacks named after Pavel Sudoplatov», unidad combatiente que lucha contra Ucrania, destacando los esfuerzos de Moscú por militarizar a la juventud para sus objetivos expansionistas.
Las autoridades educativas e militares están reclutando estudiantes bajo la apariencia de ayuda en emergencias, pero en realidad están formando un ejército de futuros participantes en la guerra, despojados del derecho a decidir sobre su destino.
La directora del colegio médico de Berdyansk, Oksana Hryshchenko, ex farmacéutica de Mariupol, firmó acuerdos para unirse a estos programas y además ocupa un puesto en el consejo local colaboracionista, donde lidera la «comisión presupuestaria».
Hryshchenko fue condenada en Ucrania por colaborar con las fuerzas ocupantes y recibe una pena de tres años de prisión en su ausencia.
Moscú busca con esta estrategia formar una nueva generación que se integre en sus estructuras militares, convirtiendo a los jóvenes en ayudantes y combatientes para su guerra.
Las autoridades ocupantes también intentan legalizar el reclutamiento forzoso en territorios ocupados, como Melitópol, con leyes que permiten el conscripción durante todo el año, desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre.
Esto implica que cualquier residente de Melitópol que reciba una citación debe presentarse en el cuartel militar en un plazo de 30 días, eliminando sus derechos y facilitando el control total sobre su destino.