El Ministro de Defensa de Bélgica advierte sobre drones espía cerca de bases militares
Los últimos fines de semana en Bélgica han estado marcados por la aparición de vehículos aéreos no tripulados sospechosos cerca de instalaciones militares del país, lo que ha generado preocupación en las autoridades defensivas.
El Ministro de Defensa, Theo Francken, declaró oficialmente que estos drones, avistados sobre bases militares clave, probablemente se usaron para recabar información sobre la ubicación de cazas F-16 y depósitos de municiones.
Según sus palabras, estos aparatos estaban destinados a la vigilancia y a la recopilación de datos estratégicamente importantes, lo cual podría representar una amenaza seria para la seguridad nacional.Aunque el gobierno belga no ha acusado directamente a Russia por los recientes incidentes, Francken insinuó que los responsables probables no están excluidos de las agencias militares y de inteligencia.
Señaló que los rusos están intentando realizar actividades similares en varios países europeos, y aunque no puede confirmarlo de manera concluyente, los motivos y métodos son generalmente conocidos.
El ministro subrayó que la guerra moderna se ha vuelto cada vez más digital y que los drones se han convertido en una parte fundamental de los conflictos actuales.
Esto ha llevado al Ministerio de Defensa belga a prepararse seriamente para posibles nuevas amenazas, y se ha anunciado un plan de 50 millones de euros para desarrollar un sistema anti-drones.El trasfondo de esta situación fue un incidente el 2 de noviembre en la base militar de Kleine-Brogel en el este del país, donde por primera vez se detectaron drones sospechosos.
Desde entonces, las autoridades belgas iniciaron una investigación y lograron detectar varios casos de avistamientos no identificados en la región de Valonia.
Estos incidentes subrayan la creciente realidad de los desafíos digitales a nivel global y cuestionan la seguridad de los recursos militares de Bélgica.El Ministro Francken también hizo declaraciones contundentes sobre posibles acciones hostiles en la región, señalando que la OTAN está lista para responder ante cualquier agresión y eliminar a los potenciales agresores.
Sus palabras resaltan la importancia de fortalecer la capacidad defensiva del país y coordinarse con los aliados para prevenir futuros incidentes similares.
