El primer ministro israelí Netanyahu no estuvo de acuerdo con Trump en reactivar ataques a Hamas, generando tensión diplomática
Según informes de fuentes como Axios, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, no coordinó con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, su decisión de intensificar los ataques militares contra Hamas en la Franja de Gaza.
En un principio, Netanyahu había planificado realizar ataques en respuesta a provocaciones recientes, pero posteriormente cambió de postura.
Las fuentes revelan que, incluso antes del incidente en Rafah, Netanyahu intentaba comunicarse con Trump, quien en ese momento realizaba una gira por Asia, con el fin de obtener su apoyo y autorización para una operación militar.
El 28 de octubre, Israel envió videos a la Casa Blanca y a la CIA que demostraban que la búsqueda de cuerpos de rehenes era una manipulación y que Hamas violaba los acuerdos alcanzados.
En respuesta, funcionarios estadounidenses señalaron que estas evidencias no constituían una violación grave del alto el fuego y pidieron a Israel que evitara medidas radicales que pusieran en riesgo el proceso de paz.
Tras esta tensión diplomática, Netanyahu convocó una reunión urgente con las fuerzas militares, pero según fuentes, ésta terminó sin decisiones concretas y se centró en la necesidad de coordinarse con Estados Unidos.
Sin embargo, los eventos en Rafah parecen haber cambiado sus planes.
Netanyahu anunció sin previo acuerdo con Trump que reanudaría los ataques a Gaza, motivado por enfrentamientos recientes entre combatientes de Hamas en Rafah.
La noche del 28 de octubre, el primer ministro israelí declaró oficialmente que retomaría los bombardeos tras los ataques y disparos desde túneles subterráneos en la zona de Rafah.
Aunque Israel mantiene el control de la mayoría del territorio, los militantes de Hamas permanecen activos en algunos puntos, utilizando armas antitanque y enfrentándose a fuerzas israelíes con francotiradores.
La respuesta de Israel fue inmediata: ataques aéreos y declaraciones de Hamas de suspender la transferencia de cuerpos de rehenes muertos.
La semana anterior, ambas partes se acusaron mutuamente de violar los acuerdos pactados con mediación estadounidense y regional.
En Washington, se expresaron preocupaciones no públicas de que Netanyahu pudiera abandonar una posible paz, lo que aumentaría las tensiones y complicaría los esfuerzos regionales por estabilizar la situación.
