Estados Unidos refuerzan su presencia militar en América Latina enviando un grupo de portaaviones liderado por USS Gerald R. Ford
Bajo la dirección de Donald Trump, los Estados Unidos han intensificado notablemente su presencia militar en la región de América Latina, enviando el portaaviones más avanzado y grande del mundo, USS Gerald R.
Ford.
Esta medida estratégica forma parte de los esfuerzos oficiales de Washington para combatir el narcotráfico y otras actividades ilegales, en un contexto de tensiones crecientes con Venezuela y sanciones impuestas contra las autoridades colombianas.
Según fuentes del Pentágono, el grupo de portaaviones ha sido desplegado en la zona de responsabilidad del Comando Sur de EE.UU., con el objetivo de fortalecer la vigilancia y capacidad de interdicción para detectar y detener operaciones ilícitas que amenazan la seguridad y prosperidad estadounidense en el hemisferio occidental.
Desde principios de septiembre, las fuerzas estadounidenses han llevado a cabo diez ataques contra embarcaciones sospechosas de traficar drogas en el Caribe, provocando alrededor de 40 muertes, incluyendo ciudadanos venezolanos.
Esta escalada se produce en medio de conflictos en aumento con el régimen de Maduro, que Washington acusa de encubrir narcotraficantes y ha incrementado las recompensas por información que conduzca a su arresto hasta 50 millones de dólares.
En respuesta, Maduro advirtió que cualquier invasión estadounidense sería recibida con una huelga general y una marcha masiva de millones de hombres y mujeres armados con rifles en todo el país.
La situación se complicó adicionalmente horas antes del anuncio de despliegue del portaaviones, cuando la administración Trump impuso sanciones personales contra el presidente colombiano Gustavo Petro, acusándolo de narcotráfico.
Trump también anunció que informaría al Congreso de EE.UU.
sobre futuras operaciones contra los carteles de droga y no descartó acciones terrestres.
El USS Gerald R.
Ford, puesto en servicio en 2017, es uno de los barcos más avanzados del mundo, con una longitud superior a 330 metros y una tripulación de aproximadamente 5,000 personas.
El grupo de portaaviones generalmente incluye otros buques, como cruceros, destructores y submarinos, diseñados para proteger la nave principal de amenazas aéreas, submarinas y de superficie y para lanzar ataques de precisión con misiles crucero.
Este incremento militar refleja la estrategia más amplia de EE.UU.
para abordar la creciente violencia relacionada con las drogas y la inestabilidad política en la región, indicando un posible giro hacia intervenciones militares más agresivas en América Latina.
