Crisis en Pokrovsk: Ocupantes mantienen el control mientras los defensores ucranianos enfrentan derrotas severas y dificultades logísticas
La situación en la ciudad de Pokrovsk ha llegado a un punto crítico tras su recaptura por parte de las fuerzas de ocupación.
Según fuentes militares ucranianas y oficiales, al menos 250 combatientes rusos controlan actualmente la ciudad.
Participan en combates callejeros, lanzan fuego de artillería y armas pequeñas contra posiciones ucranianas y atacan intencionadamente a operadores de drones, lo que dificulta las tareas de reconocimiento y defensa.
Oficiales con experiencia en la zona describen la situación en Pokrovsk como ‘más que crítica’.
Las tropas enemigas han avanzado por las líneas de suministro, utilizando drones FPV para ataques, lo que obliga a las tropas ucranianas a marchar de 10 a 15 kilómetros a pie para entregar municiones y refuerzos.
Desde que Ucrania liberó la ciudad en julio, los rusos la reocuparon hacia mediados de agosto y establecieron varios puestos de avanzada y centros logísticos cerca de la línea de ferrocarril, entre Greshino y las líneas Dachenke–Novopavlivka–Gnativka, desde donde disparan intensamente contra los defensores ucranianos.
Las fuerzas ucranianas intentan contener el avance enemigo, pero en dos regiones los rusos han logrado progresar.
Un representante de una brigada cercana confirmó que los combates callejeros continúan y se han registrado ataques rusos contra operadores de drones y enfrentamientos con infantería en el interior de Pokrovsk.
Muchas fortificaciones ucranianas al sur del ciudad permanecen, pero la comunicación con algunos unidades es escasa o nula; algunas unidades están derrotadas o gravemente heridas.
Un oficial describió la situación así: las tropas de infantería han perdido casi toda dirección, los soldados llevan de dos a tres meses en sus posiciones sin rotación y evacuar heridos resulta extremadamente difícil debido al control del enemigo sobre los caminos y approach.
Un intento de evacuar a dos heridos en la mañana fue impedido por un dron FPV que también lesionó a quienes intentaban sacarlos, uno de los heridos en estado crítico.
La escasez de infantería en las unidades se ha vuelto grave, muchas posiciones solo existen en los mapas y están desatendidas.
La logística se ha convertido en una verdadera prueba de resistencia: aunque algunas rutas pueden recorrerlas vehículos, las tropas deben marchar durante decenas de kilómetros llevando municiones, drones y suministros, todo bajo la vigilancia constante de drones espía y con el riesgo de minas.
El deterioro en Pokrovsk afecta también a Mirnograd, un centro logístico y militar crucial, ya que el transporte a este lugar pasa por Pokrovsk y supera los 20 kilómetros.
Las fuerzas ucranianas han reportado avances del enemigo en los enfoques norte de Mirnograd, y si Pokrovsk cae, la guarnición en esa ciudad podría quedar rodeada.
Expertos advierten que la situación se desarrolla en el peor de los escenarios: Pokrovsk cae más rápido de lo previsto.
Los rusos usan regularmente drones FPV para patrullar y controlar las vías, dificultando el movimiento y la evacuación.
Ambas ciudades llevan meses bajo un llamado ‘círculo de drones’, y la amenaza de un cerco real sigue siendo elevada a finales de octubre.
La jefa del Centro de Reconocimiento Aero, Maria Berlín, indicó que la línea del frente en Ucrania está al borde de una ruptura, con las tropas rusas rompiendo defensas con más frecuencia y avanzando hacia el rearme, incrementando el peligro para Zaporiyia y Dnipro.