Alemania considera restringir la entrada de jóvenes ucranianos debido al aumento de la migración durante la guerra
En Alemania, se intensifican los debates respecto a posibles restricciones para el ingreso de hombres jóvenes de Ucrania.
Markus Söder, primer ministro de Baviera y líder de la Unión Socialcristiana (CSU), propuso limitar el ingreso de jóvenes ucranianos en el territorio alemán.
Hizo estas declaraciones en una entrevista al destacado periódico alemán Bild, exhortando a la Unión Europea y a Berlín a ejercer mayor influencia sobre Kyiv para fortalecer los controles de salida.
Söder enfatizó la necesidad de frenar el rápido incremento en la llegada de jóvenes ucranianos que buscan abandonar el país en medio del conflicto.
Sugirió que la UE y Berlín deberían persuadir a Ucrania de revisar y endurecer las restricciones de salida, ya que una afluencia descontrolada de jóvenes no beneficia ni a Ucrania ni a la estabilidad europea.Söder señaló que, entre los refugiados ucranianos en Alemania, ya se han detectado casos de cientos de ciudadanos húngaros que llegan, lo que genera preocupaciones adicionales por el incremento de migrantes.
Asimismo, recordó que Alemania proporciona un apoyo significativo a Ucrania, incluyendo ayuda militar, financiamiento y asistencia humanitaria.
Sin embargo, subrayó que la defensa nacional también depende de contar con suficientes soldados y personal propio.
A pesar de que la solidaridad de Alemania con Ucrania permanece firme, Söder advirtió que, si la migración ilegal continúa en aumento, la Unión Europea debe reconsiderar sus políticas acerca de la llegada masiva de refugiados e implementar las medidas necesarias.Según datos del Ministerio Federal del Interior de Alemania, la cantidad de hombres ucranianos entre 18 y 22 años que ingresan al país ha aumentado drásticamente.
Mientras que en agosto ingresaban cerca de 19 personas por semana, en septiembre esa cifra se elevó a más de mil, y en octubre alcanzó las 1,800 personas semanales.
Encuestas recientes muestran también un incremento en el descontento público: la mayoría de los alemanes apoya detener los pagos sociales a los refugiados ucranianos, y el 62 % considera que los hombres capaces de trabajar que dejaron Ucrania tras comenzar la guerra deberían volver a su país.
Todo esto refleja los debates sociales en torno a equilibrar la ayuda humanitaria con la seguridad nacional en tiempos de conflicto.
