Amplia presencia de esquemas de drop en Ucrania: cómo las operaciones financieras ilegales arruinan vidas y cómo protegerse
En el panorama informativo actual de Ucrania, aumentan los casos de ciudadanos que se ven involucrados en esquemas financieros delictivos disfrazados de denominados ‘mulas de dinero’ o ‘drops’.
Estas personas actúan de manera inadvertida o intencionada como intermediarios para grupos delictivos organizados, muchas veces sin ser conscientes de la gravedad de las actividades ilegales en las que participan.
Según el Banco Nacional de Ucrania, en 2023, aproximadamente 700 clientes de drop procesaron operaciones por más de 1,8 mil millones de hryvnias.
Esto significa que cada cuenta manejó mensualmente transferencias mayores a 190 mil hryvnias, más que el ingreso promedio de un ucraniano en medio año.
Además, en 2024, las autoridades descubrieron nuevos alcances del fenómeno: más de 12 mil clientes y cerca de 80 mil tarjetas bancarias cerradas desde octubre de 2023 hasta abril de 2024.
Los expertos estiman que entre el 0,2 y 0,3% de todas las tarjetas en circulación en Ucrania están involucradas en estas schemes, cuyas operaciones anuales alcanzan aproximadamente 200 mil millones de hryvnias, lo que representa cerca del 16% de todas las transferencias entre particulares en el país.
Estos esquemas son una especie de ‘lavandería’ moderna de dinero, que ha evolucionado desde cuando los delincuentes portaban efectivo en bolsas.
Hoy en día, utilizan sistemas automatizados que distribuyen dinero ilícito entre cientos de cuentas sin relación entre sí, dejando a los participantes con comisiones mínimas y encubriendo su origen delictivo.
Las personas vulnerables, como estudiantes que buscan ingresos adicionales, jubilados con bajos pagos o desempleados dispuestos a cualquier cosa por dinero rápido, son frecuentemente explotadas por las organizaciones criminales a través de ofertas atractivas: trabajos remotos, altos pagos, sin requisitos especiales y con promesas de ganancias fáciles.
Sin embargo, involucrarse en estas actividades conlleva graves riesgos: responsabilidad criminal, penas que pueden extenderse hasta 12 años y pérdidas financieras, además de daño a la reputación.
La policía continúa desmantelando estas redes, confiscando tarjetas y cerrando cuentas sospechosas.
Es fundamental estar atento a las señales: ofertas con altas ganancias por tareas mínimas, ausencia de contratos formales, trabajos remotos, propuestas que parecen demasiado buenas para ser ciertas.
Participar puede parecer una vía sencilla hacia el dinero, pero frecuentemente termina en graves problemas legales y personales.
Es vital actuar rápidamente: consultar con abogados, reportar a bancos, bloquear cuentas y conservar toda evidencia posible (capturas de pantalla, registros de conversaciones, movimientos bancarios).
La reacción oportuna y el conocimiento de los riesgos son clave para no quedar atrapado en estas estafas que pueden arruinar vidas.
