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Israel, Hamas y Donald Trump: ¿Quién gana en la región y qué esperar en el futuro?

Chas Pravdy - 16 octubre 2025 13:46

El pasado lunes, líderes mundiales y la comunidad internacional presenciaron un episodio sorprendente e inesperado en la historia de los procesos de paz en Oriente Medio: la firma de una declaración que, en realidad, no cuenta con compromisos legales ni vinculantes, pero que ya genera un optimismo fundamentado respecto a la posible reducción de tensiones en la región.

Este documento, titulado ‘Declaración de Trump sobre la paz y prosperidad sostenibles’, surgió en un contexto de críticas y escepticismo general acerca de su capacidad para garantizar estabilidad a largo plazo.

Sin embargo, pese a la falta de condiciones concretas en el texto, las declaraciones y acciones previamente acordadas por las partes muestran que la primera fase del plan de Donald Trump avanza con rapidez.

Los analistas, por ahora, consideran que los avances en esta dirección son prometedores, pese a los desafíos y retrasos existentes.

¿Podemos hablar ya de una victoria definitiva o simplemente estamos en el inicio de una larga búsqueda de paz duradera en la región? El presidente de EE.UU., Donald Trump, demuestra confianza y deseo de consolidar sus logros.

Durante sus visitas a Jerusalén y Sharm El-Sheikh, hizo declaraciones audaces y exhortó a la unidad.

Sin embargo, la historia en torno a esta declaración, con su escaso contenido legal y sus complejos juegos políticos, deja muchas interrogantes abiertas.

¿Cree Trump sinceramente que firmar esta declaración pueda poner fin al conflicto palestino-israelí de larga data? ¿O es solo un acto simbólico para mejorar su imagen en el escenario internacional? En medio de batallas políticas regionales y desacuerdos internos en los países involucrados, los esfuerzos por alcanzar la paz avanzan en caminos paralelos.

Lo que queda claro es que ahora la atención se centra en finalizar acuerdos a corto plazo y en crear condiciones básicas para una mayor estabilización.

Surge entonces la pregunta: ¿qué tan realistas son las oportunidades de que estos esfuerzos declarativos y, a veces, superficiales, se traduzcan en la instauración y consolidación de una paz duradera?

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