Trump amenaza a Putin con entregar misiles Tomahawk a Ucrania si la guerra continúa
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha declarado abiertamente su disposición a suministrar a Ucrania misiles de crucero Tomahawk de alta precisión en caso de que el presidente ruso, Vladimir Putin, se niegue a tomar medidas para poner fin a la guerra.
Según Trump, esta amenaza es una poderosa herramienta diplomática para presionar a Moscú y podría convertirse en un paso clave en las negociaciones.
Planea discutir directamente con Putin sobre este asunto para advertirle de la seriedad de sus intenciones.
Durante un vuelo hacia Oriente Medio, en el que participaba en la ceremonia de firma de un histórico acuerdo de paz entre Israel y Hamás, Trump no ocultó su postura respecto a Ucrania, destacando que la administración anterior de Biden brindó apoyo financiero importante, pero no suficiente ayuda militar.
“Les dimos respeto, pero no la ayuda esencial”, afirmó.
Trump enfatizó que Estados Unidos podría enviar a Ucrania misiles Tomahawk, un arma extremadamente potente capaz de cambiar el curso del conflicto.
Expertos señalan que estos misiles tienen un alcance de aproximadamente 1,600 kilómetros y pueden atacar objetivos a gran distancia, pero su uso debe ser cuidadosamente analizado.
A pesar de ello, Trump dijo no haber definido plazos específicos para la entrega ni haber tomado una decisión definitiva, afirmando que este paso forma parte de una nueva fase en la política estadounidense respecto al conflicto.
También subrayó la importancia de las negociaciones y la perseverancia para lograr la paz.
Analistas sugieren que esta postura podría escalar la situación y obligar a Rusia a reconsiderar seriamente sus opciones.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ya ha discutido con Trump la posible adquisición de estos misiles.
Rusia ha expresado su profunda preocupación por la posible entrega de armas de largo alcance a Ucrania, temiendo que esto pueda profundizar el conflicto.
Los días recientes han estado marcados por intensas conversaciones telefónicas entre los líderes de Ucrania y EE.
UU., reflejando la creciente tensión y el deseo de encontrar vías efectivas para detener la guerra.