Respuesta del Kremlin a la nueva estrategia militar de Moldavia: amenazas y riesgos geopolíticos
El foco de atención se ha centrado en los nuevos planes militares de Moldavia, que han provocado una dura reacción por parte del Kremlin.
El portavoz presidencial ruso, Dmitry Peskov, expresó la postura oficial, en la que Rusia es considerada la ‘principal amenaza’ para Moldavia debido a la estrategia militar de Chisinau hasta 2035.
Según sus palabras, si Moldavia continúa en la senda de confrontación con Rusia para fortalecer sus relaciones con la Unión Europea, enfrentará consecuencias negativas.
Peskov subrayó que Moscú ve esta estrategia como una continuación de la política de ‘línea de conflicto’ de Chisinau, y advirtió que el actual liderazgo moldavo comete un grave error al pensar que construir relaciones con Europa implica una completa antagonización con Rusia, lo cual puede acarrear resultados perjudiciales.
Los responsables oficiales destacaron que esta postura pone en riesgo la estabilidad regional, especialmente a la luz del conflicto ruso-ucraniano en curso.
Además, el documento estratégico de Moldavia expresa inquietudes acerca de la posible creación de un ‘corredor terrestre’ para las fuerzas rusas y del riesgo de que las hostilidades se extiendan al territorio moldavo.
La presencia de aproximadamente 1,000 cascos azules rusos en Transnistria también alimenta la tensión.
Como respuesta, las autoridades moldavas han decidido aumentar su ejército en un tercio y elevar los gastos militares al 1% del PIB, además de adoptar estándares de la OTAN para fortalecer sus capacidades defensivas y la seguridad regional en un contexto de creciente tensión geopolítica.