Los centros médicos en comunidades en primera línea reciben fondos adicionales: Lyashko anuncia nuevos pagos
En un contexto de crecientes desafíos y peligros causados por las hostilidades continuas y la destrucción de infraestructuras en el este de Ucrania, el gobierno sigue implementando medidas decisivas para apoyar el sistema de salud en las regiones más vulnerables.
El ministro de Salud, Viktor Lyashko, anunció recientemente en el Congreso de autoridades locales y regionales que las instalaciones médicas ubicadas en comunidades en primera línea y en áreas de baja densidad poblacional recibirán fondos adicionales destinados a garantizar su funcionamiento estable y la prestación de atención médica de alta calidad, incluso en condiciones difíciles.
El ministro destacó que se presta especial atención a la financiación de la atención primaria en pueblos remotos y zonas con zonas de combate activo.
Estas instituciones recibirán coeficientes de financiación aumentados: para clínicas rurales, 1.2 (un aumento del 20%), y para atención de emergencia, desde 1.48 en zonas con posibles conflictos hasta 6.01 en zonas de combate activo.
Es importante señalar que el gobierno eliminó los coeficientes reductores para servicios en zonas de guerra, asegurando financiación estable incluso en caso de evacuaciones, bombardeos o daños en infraestructura.
Además, Lyashko subrayó la importancia de brindar apoyo médico, psicológico y de rehabilitación a quienes han sido liberados de la cautividad.
Se ha implementado un algoritmo claro de tratamiento, que abarca desde la evaluación inicial y exámenes completos hasta la elaboración de planes de recuperación individualizados y procesos de sanatorio.
Actualmente, la asistencia se brinda en 80 centros en 22 regiones, y los trabajadores reciben capacitación especializada en la Academia NZSU para trabajar eficazmente con pacientes que han vivido cautiverio o torturas.
Recordemos que, el 2 de septiembre, el último hospital en Konstyantynivka, en la región de Donetsk, dejó de operar debido a bombardeos diarios y la escasez de personal médico, lo que refleja la gravedad de la situación que el gobierno intenta resolver para mantener la estabilidad del sistema de salud en medio de la guerra.