Protestas masivas en EE. UU. contra Trump: manifestaciones y sus posibles consecuencias
En Estados Unidos, una serie de protestas de gran escala ha comenzado a recorrer los 50 estados, bajo el lema ‘No Kings’ (No Reyes).
Estas movilizaciones surgieron como respuesta a las políticas del presidente Donald Trump y buscan expresar la disconformidad del pueblo con las decisiones y acciones de su administración que generan un amplio debate social.
A partir del domingo, se han realizado concentraciones en pequeños pueblos y en grandes urbes, demostrando la unidad de los ciudadanos en defensa de los valores democráticos y la libertad de expresión.Los miembros del Partido Demócrata apoyan activamente estas manifestaciones, mientras que los republicanos las critican, calificándolas de antiamericanas.
El líder demócrata en la Cámara de Representantes, Hakim Jeffries, resaltó que salir a la calle para manifestar desacuerdo con el gobierno es una práctica plenamente estadounidense.
A pesar de la fuerte oposición, estas protestas cuentan con un amplio respaldo popular, sobre todo en un contexto de desafíos económicos, cierres gubernamentales y el incremento de dispositivos de vigilancia federal.Varias organizaciones de derechos humanos advierten que los participantes en estas protestas pueden ser monitoreados mediante tecnologías avanzadas de reconocimiento facial, hackeo de teléfonos móviles y seguimiento en redes sociales.
El Departamento de Seguridad Nacional ha intensificado sus labores de control mediante sistemas de videovigilancia y herramientas digitales.Se sabe que la administración Trump ha utilizado previamente aviones no tripulados MQ-9 Predator para seguir las protestas, especialmente en Los Ángeles.
Aunque en el pasado estas manifestaciones fueron pacíficas y festivas, ahora algunas han sido criticadas y etiquetadas por ciertos políticos y medios como actividades de terrorismo o provocaciones ultra-liberales.
Además, se están realizando protestas similares en Europa y el Reino Unido, principalmente frente a las embajadas estadounidenses.Trump ha hecho declaraciones mesuradas respecto a estas movilizaciones, en las que afirmó en una entrevista que ‘decirme rey no es correcto’.
Tras los disturbios recientes en varias ciudades, el ánimo de protesta en la población crece cada día más.
Analistas como Petro Gerasimenko consideran que estas manifestaciones podrían debilitar la autoridad de Trump e incluso evolucionar hacia movilizaciones civiles masivas que cuestionen la legitimidad del actual gobierno estadounidense.
