El presidente de EE.UU., Donald Trump, ordena desplegar tropas en Portland ante disturbios civiles
El sábado, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, hizo un anuncio de gran impacto en el que afirmó haber instruido al Secretario de Defensa, Mark Esper, para que envíe tropas a la ciudad de Portland, en el estado de Oregón.
El objetivo es asegurar las propiedades federales y proteger la ciudad de lo que el mandatario calificó como ‘terroristas internos’ y grupos radicales como Antifa.
Trump insinuó que ha autorizado el uso de ‘toda la fuerza’ si fuera necesario.
En publicaciones en redes sociales, el presidente instó al Departamento de Defensa a ‘proporcionar todas las tropas necesarias para defender Portland y otras instalaciones federales bajo asedio por parte de Antifa y otros terroristas internos.’ Como respuesta, el alcalde de Portland, Ted Wheeler, afirmó que cualquier despliegue militar en la ciudad es innecesario y que no existen signos de ilegalidad o violencia, subrayando que la presencia federal es solo una demostración de poder.
Líderes locales, incluido el senador Ron Wyden, criticaron estas acciones y advirtieron que podrían aumentar las tensiones, haciendo referencia a las protestas de 2020, tras la muerte de George Floyd, donde las fuerzas federales fueron desplegadas en Portland, lo que, según ellos, agravó la situación.
Trump ha acusado reiteradamente a ‘Antifa’ y otros grupos de izquierda de provocar disturbios y de atizar el caos, aunque las autoridades afirman que no se han registrado incidentes terroristas relacionados con estos movimientos.
La administración Trump continúa enfocándose en combatir la delincuencia y en la deportación masiva de inmigrantes indocumentados, lo cual ha provocado enfrentamientos con ciudades controladas por Democrats como Los Ángeles, Chicago y Washington D.C.
La reciente presencia de las fuerzas federales en Portland y otras ciudades ha generado controversia por considerarse una injerencia en los asuntos locales y un aumento de las divisiones sociales en el país.
La situación en Portland refleja las profundas grietas políticas y sociales que atraviesan a Estados Unidos en la actualidad.
