Ataque ruso en la comunidad de Sumy: destrucción y consecuencias del bombardeo nocturno
En la noche del 26 de septiembre, las fuerzas rusas llevaron a cabo un nuevo ataque aéreo en zonas residenciales de la región de Sumy, destruyendo por completo dos viviendas y dañando varias más.
El incidente ocurrió alrededor de las 4:20 de la madrugada, cuando el enemigo empleó bombas aéreas guiadas para atacar localidades dentro de la comunidad territorial de Stetskiv.
Según Serhii Kryvoisheienko, jefe de la administración militar de la ciudad de Sumy, el ataque causó daños considerables: al menos dos casas quedaron completamente destruidas, mientras que hasta diez más sufrieron daños graves.
Yurii Lysenco, líder de la comunidad local, informó que el golpe fue dirigido específicamente a la aldea de Stetskiv y añade que estos ataques agresivos han dejado severamente dañada la infraestructura, poniendo en riesgo la electricidad y el suministro de gas para los residentes.
Las evaluaciones preliminares indican que el alcance de los daños aún está siendo determinado, y persisten las preocupaciones por posibles interrupciones en los servicios.
Además, los bomberos relataron la difícil labor de apagar incendios en medio de intensos bombardeos, mostrando imágenes de los efectos de los ataques.
A las 8:40 a.m., Kryvoisheienko también informó que un dron ruso impactó cínicamente contra un vehículo del servicio de gas que acudía a evaluar los daños tras el primer ataque.
Afortunadamente, no hubo víctimas.
Más temprano, ese mismo día, potentes explosiones sacudieron Jersón, donde las fuerzas rusas lanzaron bombas guiadas, generando alarma y preocupación entre los habitantes.
La guerra continúa causando destrucción y sufrimiento en las comunidades ucranianas, obligando a sus habitantes a enfrentarse día tras día a la dura realidad del conflicto.