Rusia orquesta deliberadamente una crisis energética en la ZNPP, poniendo en riesgo a Europa
El 24 de septiembre, expertos energéticos ucranianos y representantes de “Energóatom” comunicaron una noticia alarmante: las fuerzas de ocupación rusas están obstaculizando sistemáticamente la recuperación del suministro eléctrico en la Central Nuclear de Zaporizhzhia (ZNPP), que permanece bajo control ruso.
Según informaron, por segundo día consecutivo, la mayor planta nuclear de Europa funciona únicamente con generadores diésel debido a la pérdida de conexión a la red eléctrica externa.
Esta situación es resultado de acciones deliberadas de Rusia, que se niega a reconectar la ZNPP a la red energética ucraniana tras daños en las líneas eléctricas causados por bombardeos rusos.
Esto, por un lado, genera una situación catastrófica para Ucrania y, por otro, representa una amenaza grave para toda Europa, ya que un empeoramiento de la situación puede desencadenar consecuencias de gran alcance.
Un experto de “Ukrenergo” confirmó que la línea bajo control ucraniano funciona correctamente y no existen razones técnicas para desconectarla.
Sin embargo, las fuerzas rusas retrasan intencionadamente la reconexión, difundiendo desinformación y bloqueando el acceso a recursos energéticos críticos, poniendo en riesgo la vida de millones y la seguridad nuclear.
La comunidad internacional debe intensificar la presión diplomática sobre Rusia para devolver el control de la planta a su legítimo propietario, “Energóatom”.
Los generadores diésel, utilizados solo en emergencias, no pueden sostener operaciones prolongadas de una central nuclear; su fallo podría tener consecuencias desastrosas.
Los expertos advierten que sin acciones inmediatas, la situación puede salirse de control, poniendo en peligro a toda Europa, donde millones podrían estar expuestos a riesgos de radiación.
Desde la ocupación de la planta, el 23 de septiembre se registró la décima interrupción total del suministro eléctrico, subrayando la gravedad de la crisis.
El Ministerio de Energía afirma que esta situación es consecuencia directa de ataques y daños reiterados en la infraestructura, que impiden la estabilidad operativa de la central.
Se hacen llamados a la comunidad internacional para incrementar las presiones sobre Rusia y lograr la desocupación inmediata de la ZNPP, evitando una catástrofe nuclear o radiológica.
