El Kremlin refuerza su propaganda entre los niños en los territorios ocupados: nuevos libros de historia para adolescentes bajo control ruso

En las regiones ocupadas de Donbas, especialmente en Donetsk y Lugansk, las autoridades rusas y las estructuras propagandísticas están intensificando sus esfuerzos para moldear la conciencia ideológica de las generaciones jóvenes, utilizando nuevas herramientas de influencia política y distorsión histórica.
El Centro para la Contrarrestación de la Desinformación informó que en estos territorios, los estudiantes de primaria y secundaria están recibiendo libros de historia especialmente diseñados, elaborados bajo la dirección de Vladimir Medinsky, quien es el principal ideólogo de la política histórica del Kremlin.
Estas publicaciones forman parte de un programa más amplio destinado a difundir la ideología rusa y fomentar una actitud positiva hacia las autoridades de ocupación entre los jóvenes.Los libros promueven el mito de una ‘conexión eterna’ entre las regiones ocupadas y Rusia, mientras presentan a Ucrania como un ‘enemigo’.
De esta manera, las autoridades buscan erradicar la identidad ucraniana y reemplazarla con la cultura e historia rusas.
Esta estrategia pretende desacreditar la independencia de Ucrania y crear una plataforma ideológica que fomente la lealtad al régimen de Putin en las nuevas generaciones.
Moscú reconoce la importancia del ‘frente mental’ y entiende que el control sobre la educación es tan crucial como las operaciones militares.
A través de iniciativas educativas, las autoridades de ocupación intentan formar una generación leal a Vladímir Putin, incapaz de pensar críticamente fuera del alcance de la propaganda rusa.Anteriormente, el Centro de Resistencia Nacional informó que en las escuelas de los territorios ucranianos temporalmente ocupados, se ha implementado un nuevo curso obligatorio.
Los estudiantes deben aprender y ejecutar canciones patrióticas interpretadas por propagandistas rusos como Shaman, Gazmanov, Maidánov y Trofimov, además de canciones soviéticas como el himno del Día de la Victoria.
Este paso adicional busca crear una cultura de lealtad y promover la ideología rusa entre los jóvenes bajo control de las autoridades de ocupación.