El presidente de Indonesia cancela su visita a China ante protestas masivas y disturbios políticos
Un paso político importante del líder indonesio cambió el curso de los acontecimientos en el último momento debido a la agudización de la crisis interna.
El presidente Prabowo Subianto anunció oficialmente la cancelación de su viaje planificado a China, que estaba previsto para el 3 de septiembre, para asistir a un gran desfile militar con motivo del 80 aniversario de la conclusión de la Segunda Guerra Mundial.
La decisión se tomó ante multitudinarias protestas que comenzaron en Yakarta y rápidamente se extendieron a otras regiones del país.
Las protestas inicialmente surgieron por la insatisfacción con los salarios de los legisladores y se intensificaron después de que un vehículo policial atropellara a un motociclista, lo que aumentó la frustración popular.
Las autoridades expresaron que el presidente desea supervisar personalmente la situación y buscar las mejores soluciones para estabilizar el país, y pidieron disculpas al gobierno chino por no poder asistir.
Además, la visita fue reconsiderada en vista de la próxima sesión de la Asamblea General de la ONU en septiembre.
Como respuesta a los disturbios, el gobierno indonesio suspendió temporalmente la función de transmisión en vivo de TikTok en el país, centrado en combatir la difusión de desinformación en Internet.
Además, las autoridades convocaron a representantes de plataformas sociales como Meta y TikTok para exigir una moderación más estricta del contenido.
En varias regiones, se registraron enfrentamientos y quema de edificios, incluyendo el incendio de sedes del parlamento regional.
En Makassar, en el sur de Sulawesi, se reportó la muerte de tres personas a causa del incendio del parlamento, y en Bali se utilizó gas lacrimógeno contra los manifestantes.
Se informa que algunos grupos saquearon las casas de legisladores, incluyendo la de Ahmed Sahroni, lo que provocó mayor indignación.
Los políticos criticaron la situación con humor y frustración, calificando a los críticos como “las personas más tontas del mundo”.
Paralelamente, en China, se prepara uno de los desfiles militares más grandes de los últimos años, con demostraciones de armamento avanzado, incluyendo cazas, sistemas antimisiles y armas hipersónicas.
Se espera la presencia de más de veinte líderes mundiales, entre ellos Kim Jong Un y Vladimir Putin, en un evento que refleja el aumento del poder militar de China bajo la dirección del presidente Xi Jinping y su programa de modernización del Ejército Popular de Liberación.