Ucrania responde con dureza a las acusaciones de Budapest sobre guerra y incidentes energéticos

Hungría continúa intentando manipular la narrativa en torno a la guerra en curso, culpando a Ucrania por las consecuencias de la agresión rusa y desacreditando diplomáticamente a los defensores ucranianos.
El presidente Volodymyr Zelensky reaccionó con firmeza ante las recientes declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores de Hungría, Péter Szijjártó, calificando las acciones de Budapest como un intento de distorsión pro-Rusia de la realidad y una negativa a condenar la agresión de Rusia.
Ucrania coopera activamente con la comunidad internacional, haciendo un llamado a un cese al fuego global y a la diplomacia, aunque Rusia sigue siendo el principal obstáculo.
Zelensky señaló que las recientes acciones de Hungría, incluida la prohibición de ingreso del comandante de la unidad de drones Robert Brod, de etnia húngara y ciudadano ucraniano, socavan los principios de multiculturalismo y discriminan a la comunidad ucraniano-húngara, ejerciendo presión injusta y violando normas internacionales.
Además, han surgido informes que indican que políticos húngaros intentan sembrar discordia en la comunidad ucraniana-húngara, participando en la defensa de la soberanía del país.
La postura oficial de Kiev es esclarecer todas las circunstancias a través del Ministerio de Asuntos Exteriores y responder en consecuencia, ya que esas acciones generan inseguridad en la región.
Por otra parte, los políticos húngaros pasaron de la retórica a medidas concretas.
El ministro de Exteriores, Szijjártó, anunció la prohibición de entrada para el comandante militar responsable de intentar sabotear el oleoducto ruso ‘Druzhba’ en territorio ruso, afirmando que Budapest protege su seguridad energética y soberanía.
Ucrania respondió en forma contundente, afirmando que las instalaciones energéticas rusas no tienen relación con su seguridad, y que esas acciones son simplemente herramientas para la corrupción y los intereses políticos de Hungría.