Apoyo diplomático de Europa a Moldavia ante las elecciones para contrarrestar la amenaza rusa

En los últimos tiempos, el escenario político de Moldavia se ha vuelto cada vez más tenso, a medida que el país se prepara para las elecciones parlamentarias que podrían determinar su rumbo en los próximos años.
Fuentes cercanas señalan que los líderes de la Unión Europea y de países clave del continente, entre ellos el canciller alemán Friedrich Merz, el presidente francés Emmanuel Macron y el primer ministro polaco Donald Tusk, están diseñando un plan estratégico para fortalecer la postura diplomática de Chișinău.
Este esfuerzo tiene como objetivo reafirmar la independencia y resistencia de Moldavia frente a la creciente influencia de las fuerzas pro-rusas, que esperan obtener un resultado significativo en los comicios del 28 de septiembre.
La presidenta proeuropea, Maia Sandu, ya ha coordinado encuentros con los líderes europeos para potenciar la visibilidad internacional de su gobierno y mostrar apoyo en medio de las amenazas exteriores.
Sin embargo, dicha estrategia no está exenta de riesgos: los partidos pro-rusos aprovechan la coyuntura para difundir acusaciones de excesiva dependencia de Occidente, socavando así la legitimidad del gobierno.
Expertos advierten que, a pesar del avance en la integración europea, las acciones de Moscú, que incluyen ciberataques, campañas de desinformación y movimientos de destabilización regional, siguen representando una amenaza considerable.
La comunidad internacional debe actuar con unidad para garantizar la soberanía y estabilidad de Moldavia, cuya orientación europea podría definir el equilibrio de poderes en la región.
Los resultados electorales podrán tener implicaciones de amplio alcance en la geopolítica del este europeo, por lo que la respuesta coordinada de Europa y aliados resulta hoy más necesaria que nunca.