Primera reestructuración política: Trump despide a altos funcionarios de inteligencia por investigaciones sobre interferencia de Rusia

En medio de una serie de tensiones políticas y una lucha por el control de las agencias de inteligencia, el expresidente de Estados Unidos Donald Trump dio un paso más en su controversial confrontación con los servicios secretos.
Según fuentes, incluyendo The Economist, Trump removió de sus cargos a altos oficiales de la CIA encargados del análisis del frente ruso, incluyendo a quienes han dedicado más de veinte años a la institución y participaron en la elaboración de informes sobre la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016.
Este movimiento puede interpretarse como parte de su estrategia para mantener el control sobre la narrativa y reducir la responsabilidad de los servicios de inteligencia.
Específicamente, el 19 de agosto fue privado del acceso a información clasificada una de las figuras clave: una funcionaria que supervisaba las operaciones relacionadas con Rusia y que había colaborado en la preparación del informe sobre la injerencia de Moscú.
Ella, junto con otros dos importantes oficiales, fue sancionada por la directora de inteligencia nacional, Tulsie Habbard, lo que generó preocupación entre muchos agentes actuales y retirados, ya que la pérdida de acceso a información secreta suele marcar el fin de sus carreras y puede poner en riesgo la seguridad nacional.
Además, se han producido despidos de expertos en áreas de alta tecnología, como la inteligencia artificial en la NSA, considerados entre los profesionales más informados y responsables del gobierno federal, así como otros críticos de la política de Trump en materia de seguridad.
Estas acciones señalan un aumento en la confrontación institucional y podrían tener profundas repercusiones en la política de seguridad del país en el futuro cercano.