Finlandia planea cambios radicales en el apoyo a refugiados: cancelaciones de pagos de integración generan preocupación

El Ministerio de Finanzas de Finlandia ha presentado propuestas innovadoras que buscan transformar el sistema de apoyo financiero para solicitantes de asilo y refugiados, con especial énfasis en quienes provienen de Ucrania.
Dentro de esta iniciativa de reducción de gastos, el gobierno pretende dejar de financiar programas fundamentales de integración, como cursos de idioma, asistencia en la búsqueda de empleo y charlas informativas sobre la vida en Finlandia.
Estas medidas pueden afectar significativamente a los migrantes ucranianos, quienes ya enfrentan dificultades en su proceso de adaptación y podrían derivar en un aumento de la tensión social.
Según las estimaciones del Ministerio, cancelar la ayuda financiera permitiría optimizar los presupuestos nacionales y reducir los gastos en esta área en más de 300 millones de euros en un plazo de dos años.
La discusión oficial sobre esta propuesta está prevista para el otoño, y la decisión final será tomada por el parlamento.
La noticia ha provocado preocupación entre defensores de derechos humanos y expertos, quienes advierten sobre posibles consecuencias negativas para los refugiados ucranianos que dependen de programas de integración.
Actualmente, en Finlandia viven aproximadamente 71,000 refugiados ucranianos, y la Unión Europea ha extendido la protección temporal para los ciudadanos ucranianos hasta 2027.
Además, se señala que las restricciones financieras están intensificando la tensión en los países receptores, especialmente en la República Checa, donde ya se percibe cansancio por la afluencia de migrantes debido a problemas económicos.