Operaciones partisanas interrumpen rutas logísticas clave cerca de Rostov: infraestructura ferroviaria dañada y sus repercusiones en el enemigo

La noche del domingo, miembros del movimiento partisan “ATES” llevaron a cabo una audaz operación de sabotaje de gran estrategia, confirmando una vez más la capacidad de los grupos clandestinos para actuar en lo profundo del territorio enemigo.
Lograron dañar una importante sala de relés en la línea ferroviaria cercana a Rostov, afectando un núcleo logístico fundamental en la región.
Según informes preliminares, la acción ocurrió en áreas cercanas a la aldea de Kalínino, y sus efectos resultaron catastróficos para el transporte en ese sector del frente.El paro del movimiento ferroviario provocó que los recursos se redirigieran por rutas alternativas, elevando la dificultad en el suministro de equipos militares, municiones, combustible y tropas.
Expertos señalaron que esta interrupción en la logística desencadenó una reacción en cadena que afectó negativamente las capacidades bélicas del enemigo.
Las fuerzas rusas tuvieron que reducir la intensidad de los bombardeos artilleros debido a la escasez de municiones, un elemento crucial en el equilibrio en el frente.Los analistas sostienen que estas tácticas partidistas complican significativamente la planificación de ofensivas enemigas y acortan el camino hacia la ruptura de sus defensas.
Resaltan que estos golpes dirigidos a centros logísticos disminuyen rápidamente la eficacia combativa del adversario y aumentan la presión sobre su línea defensiva, creando nuevas oportunidades para las fuerzas ucranianas.
Se recuerda que en esta misma región ya se han producido ataques similares, incluyendo en estaciones ferroviarias en Rusia cercanas a Rostov y en la infraestructura ferroviaria de Yeisk.