Misiles rusos vuelven a arrasar Kyiv: una amenaza constante para la paz y la seguridad

En la noche del 4 de julio, las fuerzas rusas llevaron a cabo un nuevo ataque con misiles en la región de Kyiv, afectando especialmente al distrito de Fastiv. Estos lanzamientos tienen como objetivo infundir miedo en la población civil, sembrar el caos y socavar la infraestructura regional. Según informó el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania en su canal oficial de Telegram, las consecuencias del ataque fueron bastante graves: se dañaron edificios residenciales e industriales, se destruyeron varios garajes privados y los techos de varios bloques de viviendas sufrieron daños considerables. Los equipos de emergencia respondieron rápidamente, apagando incendios y reparando los daños. Afortunadamente, no se reportaron víctimas ni heridos, aunque las destrucciones marcan profundamente la región. Se ha informado que los rescatistas trabajan de manera continua, las 24 horas, para garantizar la seguridad de la población y remediar los efectos de este acto terrorista. Mientras tanto, en Kyiv y áreas cercanas, la alerta aérea ha estado activa durante más de 12 horas, desde que fue declarada el 3 de julio a las 16:52. Este ataque es solo uno de muchos episodios de agresiones destructivas que han causado daños extensos en edificios altos en los distritos de Bucha y Fastiv, según fuentes oficiales. Es un recordatorio claro del incremento en las amenazas y de la necesidad urgente de fortalecer las medidas de seguridad para proteger a la población civil en la región.