El Consejo de Ministros de Ucrania aprueba varios cambios en la administración, despide al defensor del idioma y nombra nuevas autoridades

El Gobierno de Ucrania ha tomado medidas importantes en la gestión de personal, despidiendo a Taras Kremen de su cargo como Comisario para la Protección del Idioma Estatal, marcando una significativa reestructuración en la última reunión del gabinete. Esta transición se hizo efectiva tras la finalización de su mandato, que concluye el 8 de julio de 2025, momento en que Kremen dejará de tener responsabilidades oficiales en esta área. Además, el Consejo decidió destituir a Hryhoriy Ishchenko como director de la Agencia Estatal para la gestión de la zona de exclusión, nombrando a Vladimir Feshchenko como jefe provisional para garantizar la continuidad de esta importante estructura estatal. La reestructuración también incluyó cambios en la dirección del sector del transporte marítimo y fluvial interno: Mykola Kravchuk fue nombrado como encargado provisional, tras haber sido anteriormente su primer viceministro, y ahora ocupa oficialmente el cargo de jefe de la agencia. Asimismo, Natalia Kichuk fue designada como vicejefa de la Agencia Estatal para la gestión de reservas y asumió además funciones de directora interina. Otra incorporación importante fue la de Olga Polotska, quien se convirtió en directora ejecutiva del Fondo Nacional de Investigación de Ucrania, fortaleciendo la capacidad administrativa de esta institución estratégica. Por otra parte, las organizaciones civiles manifestaron su preocupación por la falta de transparencia en el proceso de selección del nuevo defensor del idioma, denunciando que la lista de candidatos fue presentada en secreto y sin un amplio debate público. También expresaron dudas sobre las cualificaciones de la mayoría de los aspirantes y señalaron que este procedimiento podría estar encaminado a debilitar la institución encargada de proteger el lengua estatal. Recordemos que Taras Kremen fue designado en este puesto por el gobierno el 8 de julio de 2020, en sustitución de Tetyana Monakhova, quien renunció en mayo por falta de capacidad para crear el secretariado del defensor y por retrasos en el pago de su salario durante más de seis meses. Estos problemas provocaron dificultades financieras y operativas significativas, y Kremen tuvo que gastar alrededor de 30,000 grivnas de su propio bolsillo para cumplir con sus responsabilidades.