Cómo Rusia Convierte a los Adolescentes Ucranianos en Armas en Su Guerra Contra Ucrania: Nuevos Desarrollos y Desafíos de Seguridad

En el contexto de la guerra híbrida, la Federación de Rusia está empleando cada vez más métodos innovadores para debilitar a Ucrania y socavar su seguridad nacional. Una tendencia particularmente preocupante es la captación de adolescentes ucranianos para utilizarlos como herramientas de influencia y elementos terroristas, lo que representa una amenaza seria para la juventud y la estabilidad del país. Según analistas y autoridades ucranianas, los servicios secretos rusos han estado llevando a cabo campañas masivas de reclutamiento a través de aplicaciones de mensajería populares, especialmente Telegram, enfocándose en grupos vulnerables como huérfanos, desplazados internos y jóvenes con deseos de ganar dinero rápidamente o obtener los últimos gadgets. Esto plantea grandes desafíos para la seguridad, ya que los reclutadores ofrecen ganancias fáciles y rápidas — a veces miles de dólares — y animan a los jóvenes a participar en tareas de espionaje, incendiarios o incluso actos terroristas ordenados por agencias rusas. Desde la primavera de 2024, se han detenido a más de 700 menores, todos implicados en actividades de espionaje, sabotaje y explosiones encargadas por la inteligencia rusa. Aproximadamente el 25% de ellos son menores de 18 años, reclutados con un propósito claro: realizar sabotajes contra infraestructuras energéticas, instalaciones militares y sistemas de defensa aérea. Los métodos de reclutamiento siguen un patrón definido: agentes anónimos contactan a los jóvenes a través de plataformas, prometiendo ganancias rápidas, compartiendo coordenadas y dando instrucciones para tareas específicas, como tomar fotos o colocar explosivos. A veces, utilizan juegos de búsqueda para simular actividades inocentes, que en realidad sirven para preparar a los jóvenes para acciones terroristas. Además, los agentes rusos se hacen pasar por funcionarios ucranianos, manipulan a los adolescentes y los obligan a sabotear o lanzar ciberataques en nombre del país. Estas actividades tienen consecuencias peligrosas para la seguridad del estado y el futuro de la juventud ucraniana. Expertos, incluyendo psicólogos sociales, llaman a fortalecer las campañas de información y educación para proteger a los jóvenes de ser vulnerables y de caer en las redes de reclutamiento. Más detalles sobre esta problemática se encuentran en el artículo "Adolescentes terroristas: la edad explosiva al servicio del FSB" de Oleg Pokalchuk.