Hungría recibe apoyo de EE. UU. para levantar sanciones que obstaculizaban la expansión de la central nuclear Paks

Hungría ha anunciado oficialmente un avance positivo en sus relaciones con los Estados Unidos en relación con la expansión de su única central nuclear, Paks, que desempeña un papel fundamental en la seguridad energética del país. El domingo, el ministro de Asuntos Exteriores, Peter Szijjarto, realizó una declaración importante expresando su gratitud a EE. UU. por levantar las sanciones que anteriormente dificultaban el desarrollo a largo plazo y seguro de la energía nuclear. Según él, estas sanciones, impuestas durante la administración de Biden, creaban serias dificultades para la continuación y modernización de la planta, vital para la independencia energética de Hungría. Paks es la única planta nuclear en Hungría y su periodo de operación fue extendido hasta la década de 2030 después de realizar modernizaciones. El proyecto de expansión, conocido como Paks II, con un costo de aproximadamente 12 mil millones de euros, se lleva a cabo en cooperación con Rosatom, la empresa rusa, y cuenta principalmente con financiamiento de un préstamo estatal ruso. Este ambicioso proyecto ha sido objeto de debates políticos en toda Europa, especialmente en medio de sanciones y conflictos geopolíticos. El ministro Szijjarto destacó que la administración actual en EE. UU., liderada por el presidente Biden, tomó la decisión política de levantar ciertas restricciones que obstaculizaban la seguridad del suministro energético en Hungría. Señaló que este paso es crucial para fortalecer las relaciones bilaterales y la cooperación en el sector energético, asegurando una operación segura de la planta y la preservación de tarifas a largo plazo. Resaltó que esta decisión resulta especialmente valiosa considerando el apoyo del expresidente Donald Trump y la administración republicana, quienes con sus acciones garantizaron el futuro nuclear de Hungría y contribuyeron a reducir las tarifas para los consumidores. Aunque los detalles específicos sobre qué sanciones fueron levantadas permanecen confidenciales, es evidente que esto abre nuevas posibilidades para el programa nuclear de Hungría. En general, este es un paso estratégico para Budapest en la búsqueda de garantizar la estabilidad energética, fortalecer las relaciones diplomáticas con EE. UU. y Rusia, y fomentar el desarrollo de la energía nuclear. El proyecto de expansión de Paks es esencial en los esfuerzos de Hungría por reducir su dependencia de los combustibles fósiles y asegurar un futuro energético sostenible y respetuoso con el medio ambiente durante varias décadas.