Noche en Odesa: Rusos atacan la ciudad con drones de ataque y numerosas explosiones
La noche del 28 de junio, se escuchó de nuevo un fuerte ruido de explosiones en Odesa, lo que indicaba un nuevo ataque de los ocupantes rusos contra esta ciudad portuaria de importancia estratégica. En ese momento, ya se vislumbraba una imagen familiar: desde las 23:40 del 27 de junio, residentes y visitantes de la ciudad escucharon una serie de fuertes explosiones y el sonido de fuego de defensa aérea automática. El alcalde de Odesa, Gennady Trukhanov, informó de inmediato sobre esta emergencia, instando a todos los odesanos a refugiarse para evitar el peligro. Según la Fuerza Aérea de las Fuerzas Armadas de Ucrania, al anochecer, drones kamikaze (drones de ataque de los ocupantes rusos) volvieron a aparecer sobre la ciudad. Se trató de una nueva oleada de ataques dirigidos contra infraestructuras críticas y zonas vitales de la ciudad. A las 23:51, aparecieron advertencias en redes sociales: el ejército ucraniano instó a los residentes a refugiarse debido al alto riesgo para la vida y la salud. Ya a medianoche, la situación en Odesa seguía siendo tensa: las explosiones y el sonido de los sistemas de defensa aérea aún se escuchaban en el centro de la ciudad. Los residentes locales reportaron intensos tiroteos e intentos de neutralizar drones que atacaban con avidez objetivos en el distrito de Primorsky, en particular en el centro de la ciudad. En ese momento, Trukhanov advirtió a los residentes que el peligro era especialmente grave en los distritos centrales, en particular en el corazón de Odesa, donde se ubican importantes edificios administrativos e instalaciones comerciales. En general, el ataque nocturno confirmó una vez más la alta disponibilidad de las fuerzas rusas para usar drones de ataque con el fin de dañar infraestructuras clave y desestabilizar la situación en la región. Las autoridades locales y los servicios de seguridad han intensificado sus esfuerzos para minimizar las consecuencias del ataque, pero lo cierto es que Odesa se encuentra nuevamente en alerta máxima. Los residentes permanecen en estado de tensión, a la espera de nuevos anuncios oficiales e información sobre los posibles acontecimientos.