Los ocupantes rusos volvieron a disparar contra un autobús humanitario en la región de Dnipró, intentando impedir la evacuación de civiles
El 28 de junio, las fuerzas rusas llevaron a cabo un ataque contra un transporte humanitario en la región de Dnipró, una vez más recurriendo al uso de drones explosivos en sus delitos. El incidente ocurrió por la mañana, cuando el autobús de la misión humanitaria "Proliska" se dirigía con el propósito de evacuar familias con niños pequeños de territorios donde se realiza una evacuación forzada — informó el director de la organización, Yevhen Kaplin, en su perfil oficial de Facebook. Según las palabras del señor Kaplin, los terroristas rusos emplearon un dron bombardero, un verdadero vehículo aéreo no tripulado mortal, para arrojar explosivos peligrosos en la ruta de la misión humanitaria. El artefacto explosivo, que en sus características tenía un efecto fragmentario y antibuque, fue arrojado a menos de medio metro del vehículo. Como resultado del ataque, el autobús sufrió daños considerables: ruedas traseras dañadas, el tanque de combustible afectado, ventanas rotas, el interior destruido y el eje de transmisión dañado. Esto vuelve a evidenciar la brutalidad y el cinismo sin censura de la autoridad de ocupación, que incluso durante la evacuación de civiles utiliza armas de destrucción masiva. Es importante señalar que en el autobús en el momento del ataque no había personas evacuadas — el vehículo se movía detrás de las personas que ya habían recibido permiso para evacuar y esperaban en un lugar seguro para obtener su pase. El conductor se mantuvo ileso, aunque psicológicamente traumatizado por la audaz agresión. Otros detalles serán proporcionados en próximas informaciones, ya que en las zonas de combates activos la imprevisibilidad y la dificultad para garantizar la seguridad de los civiles son comunes. Este audaz incidente vuelve a demostrar el nivel de brutalidad de los ocupantes rusos, que no dudan en usar medios letales incluso en casos de rescate de vidas civiles. Las autoridades locales y organizaciones responsables llaman a la comunidad internacional a aumentar la presión sobre el Kremlin, reforzar la protección de los corredores humanitarios y garantizar un paso seguro para las columnas de evacuación. Como indican en "Proliska", la situación en la región continúa siendo tensa, y las rutas de evacuación están bajo riesgo constante. Por segunda vez en los últimos meses, los rusos intentan obstaculizar el transporte humanitario con supuestos "descarrilamientos por fuego" mediante el uso de drones — medios peligrosos e impredecibles de guerra que, en esta ocasión, cumplieron su misión loca: expandir el temor y la destrucción en quienes buscan salvar sus vidas. En medio de estos sucesos, se expresa con especial preocupación la necesidad de brindar apoyo internacional y fortalecer los mecanismos de protección civil en la zona del conflicto. Cada nuevo ataque es no solo una pérdida material y una destrucción, sino también una prueba más de la cínica irresponsabilidad con la que los ocupantes tratan las vidas humanas.