Cazas del SBU atacan helicópteros rusos en Crimea: tres helicópteros destruidos en el aeródromo de Kirovskoe
La noche del sábado 28 de junio, las fuerzas especiales ucranianas llevaron a cabo con éxito una operación en territorio ucraniano ocupado temporalmente por Rusia. Según el servicio de prensa del Servicio de Seguridad de Ucrania, en el marco del ataque con drones, los cazas de las fuerzas especiales ucranianas atacaron el aeródromo militar de Kirovskoe en Crimea, territorio bajo control ruso desde 2014. Como resultado de la operación especial, varios helicópteros militares rusos clave fueron destruidos, incluyendo vehículos de ataque y multipropósito: Mi-28, Mi-8 y Mi-26. Según datos preliminares, la operación se planeó cuidadosamente y se llevó a cabo utilizando drones de alta tecnología, lo que les permitió evadir la defensa aérea rusa y obtener los máximos resultados. El servicio de prensa destaca que actuaron con la máxima precisión para infligir el máximo daño al enemigo y debilitar su presencia militar en la región. Este ataque sorprendió a las fuerzas de ocupación rusas, que se vieron obligadas inesperadamente a reconocer la pérdida de varios vehículos de combate importantes. Como resultado, el ejército ruso suspendió temporalmente los vuelos en este aeródromo, y fuentes locales informan de un aumento de la tensión entre las fuerzas de ocupación y de numerosas medidas para reforzar la seguridad de las instalaciones. Con este ataque, Ucrania confirmó una vez más su capacidad para actuar con eficacia en los territorios ocupados y demuestra su determinación de luchar por la recuperación de los territorios controlados por Rusia. La operación en el aeródromo de Kirovskoe es un claro ejemplo de las contundentes medidas que emplean los servicios especiales ucranianos para reducir el poder militar del enemigo y proteger a sus ciudadanos. En general, este incidente nos recuerda una vez más la alta tensión en la región y el continuo deseo de Ucrania de reducir la presencia y la capacidad militar de los agresores rusos en la parte temporalmente ocupada de la península de Crimea. Los planes de los servicios militares y de inteligencia ucranianos incluyen claramente la posibilidad de continuar dichas operaciones y mantener la presión sobre la infraestructura militar rusa en esta región de importancia estratégica.