PUTIN DEMUESTRA SU DISPOSICIÓN PARA LA TERCERA RONDA DE NEGOCIACIONES CON UCRANIA, A PESAR DE LAS GRAVES CONTROVERSIAS

El líder del Kremlin, Vladimir Putin, ha declarado oficialmente que Rusia está lista para una tercera ronda de negociaciones con Ucrania, a pesar de las contradicciones existentes en los memorandos firmados y su contenido. Lo anunció durante su discurso en la cumbre de la Unión Económica Euroasiática en Minsk. En un contexto de creciente tensión y constantes intentos diplomáticos de llegar a un entendimiento, sus palabras confirman la intención del Kremlin de continuar el diálogo en busca de un compromiso, pero al mismo tiempo plantean dudas sobre la verdadera disposición de las partes para una tercera ronda de renegociaciones. Durante una conferencia de prensa, los periodistas preguntaron a Putin cuándo se espera la próxima reunión del grupo negociador y cómo se abordarán los memorandos firmados previamente. En respuesta, señaló que “los memorandos de Ucrania y Rusia tienen un contenido completamente opuesto”, pero enfatizó que el objetivo principal de las negociaciones, en cualquier caso, es encontrar maneras de acercarse y alcanzar soluciones de compromiso. Al mismo tiempo, el líder de Putin se negó a evaluar el memorando ucraniano en detalle, citando el posible impacto negativo de dicha evaluación en el proceso de negociación y las perspectivas de alcanzar acuerdos. El líder del Kremlin enfatizó que ya se había alcanzado un acuerdo entre ambos países para que, tras la finalización de la primera fase, en particular el intercambio de prisioneros y el traslado de los cuerpos de los fallecidos, se llevara a cabo una tercera ronda de negociaciones. Añadió que este evento debe coordinarse con los líderes turcos y el lugar previsto para la futura reunión. “Estamos totalmente preparados para dicha reunión”, enfatizó Vladimir Putin. “Es necesario determinar el lugar y la fecha de las negociaciones. Espero que el presidente turco, Mustafa Erdogan, mantenga su apoyo constante al proceso”, declaró. Según el líder ruso, la decisión sobre la fecha y el lugar de la reunión deberá ser tomada por los jefes de los grupos negociadores. Están estableciendo comunicación operativa mediante llamadas telefónicas y actualmente las partes están discutiendo activamente los detalles. "El tema principal de la próxima reunión será la discusión de ambos memorandos", declaró Putin. La próxima reunión en formato de negociaciones entre Ucrania y Rusia se convirtió en el centro de atención tras la conclusión de la segunda ronda, celebrada el 3 de junio en Estambul. Posteriormente, las partes acordaron importantes medidas humanitarias: un alto el fuego en el frente, el intercambio de todos los soldados heridos y enfermos graves, así como la repatriación de los cadáveres en una proporción de 6.000 por 6.000. Ucrania envió por separado a Rusia una lista con los nombres de los niños que deben ser repatriados, lo que añadió un componente humanitario al proceso de negociación. En aquel momento, se informó de que se planeaba una nueva ronda de negociaciones en Estambul después del 22 de junio, y se esperaba que Ucrania y Rusia decidieran una fecha específica y acordaran la organización de las próximas reuniones. El ministro de Defensa de Ucrania, Rustem Umerov, señaló que, tras la conclusión de las conversaciones sobre cuestiones humanitarias en las negociaciones, Ucrania busca abordar el tema clave: la reunión entre los presidentes Volodymyr Zelensky y Vladimir Putin. Esto demuestra la intención de Ucrania de no detenerse en los procesos humanitarios y avanzar en la búsqueda de soluciones políticas que puedan sentar las bases para estabilizar la situación y poner fin a la guerra. Al mismo tiempo, aunque no hay una fecha oficial, las partes continúan trabajando activamente en los detalles y acordando posiciones por vía diplomática. En general, la situación sigue siendo tensa e incierta, pero esto no detiene los esfuerzos diplomáticos para encontrar vías de entendimiento y una posible solución al conflicto. Las declaraciones de Putin indican que, a pesar de las tensiones ideológicas y políticas, las partes buscan mantener el diálogo, pero su verdadera intención sigue siendo cuestionable: si podrán lograr resultados a corto plazo, respaldados por acuerdos concretos, y si la dinámica política de los procesos internos en Ucrania y Rusia obstaculizará este proceso.