Estados Unidos y China acuerdan nuevos aranceles y protocolos de cooperación
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, anunció oficialmente la consecución de un importante acuerdo entre Washington y Pekín sobre restricciones arancelarias y compromisos comerciales. Según Lutnick, ambos países firmaron la versión final del documento hace dos días, sentando las bases para la eliminación gradual de las barreras comerciales y estableciendo nuevas condiciones para la interacción en el ámbito de los recursos y tecnologías estratégicos. La fuente de esta información fue la emisión de Bloomberg Television, donde el titular del ministerio estadounidense informó que el acuerdo fue el resultado de dos etapas de negociaciones: la primera tuvo lugar en Ginebra y la segunda en Londres. Se trató de un proceso a largo plazo, durante el cual las partes alcanzaron compromisos que definieron claramente el marco de las futuras relaciones comerciales. Según los detalles, el documento firmado regula no solo la reducción de los aranceles, sino que también establece obligaciones mutuas en materia de suministro de materiales estratégicos. Es importante que China se vea obligada a reanudar el suministro de tierras raras a Estados Unidos, elementos indispensables para numerosos sectores industriales, incluida la producción de productos de alta tecnología. En respuesta, Washington prometió levantar gradualmente las restricciones a las exportaciones a China de diversos materiales y tecnologías importantes. Esto también aplica al etano, ampliamente utilizado en la producción de plásticos, así como al software para la creación de microcircuitos y motores a reacción. Al mismo tiempo, Howard Lutnick enfatizó que el levantamiento de las restricciones no será automático ni completo hasta que comiencen a llegar desde China suministros de imanes y otros componentes estratégicos. "Nos suministrarán tierras raras, y tan pronto como esto suceda, levantaremos nuestras contramedidas", señaló el ministro. Esto indica que pronto podemos esperar un levantamiento gradual de las restricciones comerciales, lo que será una señal para la reanudación de una cooperación comercial estable. Se espera que la aprobación final de este acuerdo dependa de la decisión de los líderes estadounidenses —el presidente Donald Trump— y el líder de la República Popular China, Xi Jinping. Son sus firmas las que deberían decidir el futuro de un nuevo pacto comercial, que podría afectar significativamente la situación económica mundial y reconsiderar las tensiones en el comercio global entre las dos economías más grandes del mundo.