La Guardia Nacional condena el ataque a un oficial de la Brigada Azov y promete investigación
La Guardia Nacional de Ucrania insiste en una investigación rigurosa del incidente ocurrido el 13 de junio en Ivano-Frankivsk, donde Andriy Korinevych, oficial de la 12.ª Brigada de Fuerzas Especiales Azov, fue atacado. Los departamentos militares expresaron su enérgica condena a cualquier acto violento contra militares, independientemente de su unidad o rango, y enfatizaron que el suceso es inaceptable para el ejército moderno de Ucrania. La declaración oficial de la Guardia Nacional es inequívoca: apoyan a las fuerzas del orden en sus esfuerzos por llevar a cabo una investigación objetiva e imparcial, y se esforzarán por esclarecer todas las circunstancias y llevar a los responsables ante la justicia conforme a la ley. Según las fuerzas del orden, actualmente todos los sospechosos del ataque han sido identificados y se están llevando a cabo las investigaciones y la búsqueda operativa para llevarlos ante la justicia. La NGU enfatizó que, en esta situación, es especialmente importante mantener la unidad: “Debemos recordar que nuestro principal enemigo es la Federación Rusa. Y nuestra tarea común es enfrentarlo unidos”. Las agencias prometieron una estrecha cooperación con las fuerzas del orden para esclarecer exhaustivamente las circunstancias del incidente y evaluar legalmente las acciones de todos los involucrados. El contexto del conflicto es de particular importancia. Andriy Korynevych, militar de la brigada Azov, informó haber sido atacado por un grupo de dos soldados de la Tercera Brigada de Asalto Independiente. Identificó a los atacantes, Semyon Klok y Vasyl Bondarenko, personas que ya habían sido llevadas ante la justicia, y añadió que otro participante, Maksym Bilogub, participó en el ataque, y también mencionó a otro soldado, Serhiy Tsyganchuk. Korynevych está convencido de que el comandante del Tercer Cuerpo de Ejército, Andriy Biletsky, ocultó a los atacantes. Al momento de la publicación, ni la Tercera Brigada de Asalto ni el mando del cuerpo se habían pronunciado al respecto. El 25 de junio, la fiscalía informó de las sospechas sobre dos militares implicados en el ataque y declaró que se estaba investigando la posible participación de otras personas en este audaz caso. Mientras tanto, la propia formación militar aún no ha emitido una reacción oficial ni se ha pronunciado sobre la situación. Los oficiales militares responsables de la seguridad de las acciones y del mantenimiento de la disciplina enfatizan que actuarán dentro de la ley y que todos los responsables serán llevados ante la justicia. Este suceso pone de relieve una vez más la importancia de la unidad en los círculos militares y de mantenerse centrados en la defensa del país y el mantenimiento de la disciplina interna. Al mismo tiempo, plantea preocupación por el nivel de interacción entre unidades y los conflictos internos que pueden socavar la moral y distorsionar los objetivos comunes del ejército ucraniano: la lucha contra el enemigo externo y la protección de la independencia del Estado.