La OTAN considera improbable el cerco de Sumy debido al elevado número de bajas rusas

Datos de inteligencia de la Alianza del Atlántico Norte indican que las tropas rusas están sufriendo pérdidas significativas durante su avance en el norte de Ucrania, especialmente en la región de Sumy. Sin embargo, un cerco completo de esta ciudad es improbable, e incluso inalcanzable, para las fuerzas de Moscú en este momento. Así lo anunció un alto funcionario de la OTAN durante la cumbre, resumiendo datos secretos de inteligencia de los aliados y respaldando su postura con estimaciones confirmadas de las bajas rusas sufridas por el ejército ucraniano. Según la fuente, basándose en información operativa, las bajas rusas ya han superado el millón de personas, de las cuales unas 250.000 mueren en combate. Las pérdidas diarias promedian más de 1.300 personas, una cifra muy elevada dada la severidad de las tácticas empleadas por Moscú: ataques a gran escala con un gran número de bajas, incluso en la región de Sumy. Según los expertos, estos ataques tienen un efecto devastador en las fuerzas rusas, debilitándolas durante el avance. Al mismo tiempo, la OTAN señala que el Kremlin busca crear una zona de contención tras la operación Kursk, pero, a pesar de los avances tácticos y los éxitos individuales, la inteligencia occidental no registra el cerco estratégico de Sumy. El alto funcionario enfatizó: "Actualmente, el cerco de Sumy en un futuro próximo parece improbable y no un escenario realista". Además de avanzar en la región de Sumy, Rusia intenta afianzarse en otros sectores del este de Ucrania, pero la línea del frente apenas ha experimentado cambios significativos en los últimos dos meses. Además, la OTAN observa que las tropas ucranianas están repeliendo con éxito a las fuerzas rusas en la región de Kursk, en particular en la zona de Tiotkino. Esto frena la ofensiva rusa y demuestra que ambos bandos tienen ventajas tácticas: los rusos avanzan en algunas direcciones, mientras que el ejército ucraniano mantiene su posición e incluso contraataca en otras. Este equilibrio, según los aliados, reduce la probabilidad de una operación a gran escala por parte de Rusia en torno a Sumy. Es importante señalar que esta postura de la OTAN se ha mantenido sin cambios durante varios meses. A principios de verano, "Verdad Europea" ya informó que la inteligencia internacional no registraba indicios de preparativos para una ofensiva rusa a gran escala sobre Sumy o la región de Dnipropetrovsk, a pesar del aumento de los ataques rusos en el noreste de Ucrania. En respuesta a los últimos ataques con misiles en la región de Sumy, Occidente volvió a enfatizar que Moscú está incrementando activamente la tensión, lo que generó indignación internacional y llamamientos a la moderación. Por lo tanto, la situación en la región sigue siendo tensa y dinámica, pero un cerco directo de Sumy es actualmente improbable, y las pérdidas y el agotamiento rusos ponen en duda la capacidad del Kremlin para afianzarse en este territorio a corto plazo.