Bombardeo ruso golpea de nuevo la región de Nikopol: un herido, destrucción e incendios
El 24 de junio, una oleada de bombardeos enemigos de 12 horas azotó el distrito de Nikopol, en la región de Dnipropetrovsk, causando considerable destrucción, víctimas e incendios a gran escala. Según el jefe de la administración estatal regional, Serhiy Lysak, una mujer de 74 años resultó herida en los ataques y se encuentra actualmente en tratamiento ambulatorio. La población civil debe lidiar con las consecuencias de los daños causados por los ataques enemigos. El bombardeo afectó a varios asentamientos, en particular el centro del distrito de Nikopol, así como a las comunidades de Marhanetska, Myrivska, Chervonogryhorivska y Pokrovska. Como resultado de este ataque, se dañaron viviendas, instalaciones administrativas y de infraestructura. En particular, un edificio de gran altura, varias viviendas particulares y dependencias resultaron dañadas, y la infraestructura de gas también se vio interrumpida. Las explosiones dañaron un gran gasoducto, lo que representa un peligro adicional para los residentes locales. Además, los ataques provocaron incendios que consumieron una cafetería en el centro de Nikopol y un enorme campo de trigo en llamas. Se desató un incendio a gran escala, que los servicios de rescate combatieron durante varias horas para localizar y evitar que se extendiera a una zona mayor. Este fue otro duro golpe para la infraestructura agrícola local, principal fuente de ingresos de la región. Además, se registraron daños en las líneas eléctricas en la comunidad de Velykymykhailivska, perteneciente al distrito de Synelnyky. La infraestructura energética sufrió daños significativos debido a los ataques selectivos, que provocaron un corte temporal del suministro eléctrico en varios asentamientos, además de dificultar aún más las labores de restauración para los residentes y las autoridades locales. Los residentes de Nikopol y las aldeas circundantes, indignados y tensos, se encuentran nuevamente en estado de alarma y tensión. Se ven obligados a responder a la destrucción y la incertidumbre, lo que supone un nuevo desafío para ellos. Las autoridades y los servicios locales están trabajando urgentemente para evaluar la magnitud de los daños y preparar nuevas medidas para restaurar la zona residencial y la infraestructura de la región. Las consecuencias del bombardeo nocturno ponen de relieve el nivel de agresión que las tropas rusas siguen ejerciendo contra las comunidades pacíficas de Ucrania, ignorando las normas internacionales y atentando contra la vida humana. Las autoridades locales y estatales instan a la población a ser precavida, respetar las normas de seguridad y no ignorar las señales de alarma, ya que la situación sigue siendo compleja e inestable.