El tribunal ha dictado la detención de una diputada del Consejo Regional de Dnipropetrovsk, sospechosa de servicio militar ficticio y estafas salariales
Según la sentencia, Marianna Kiziyarova (anteriormente Miroshnychenko) permanecerá en prisión preventiva con posibilidad de fianza. Esta decisión supone un paso más en la investigación, que plantea la cuestión de posibles abusos en el ejército y tramas de corrupción entre funcionarios del gobierno local. La fiscalía insistió en la detención con la alternativa de una fianza de 908.000 grivnas, mientras que la defensa solicitó la aplicación del arresto domiciliario nocturno o el establecimiento de una fianza económica con límites más moderados. Sin embargo, el tribunal optó por una opción de compromiso: 52 días de detención o una fianza de más de 750.000 grivnas (757.000 UAH). Periodistas de Radio Svoboda informan que, al elegir la medida preventiva, el tribunal tuvo en cuenta las circunstancias y la naturaleza de las acciones sospechosas de la diputada. En la audiencia, Kiziyarova se negó a comentar la situación, aunque previamente había negado categóricamente todas las acusaciones en sus redes sociales, intentando minimizar el impacto en su reputación. Al mismo tiempo, el tribunal decidió prohibir que se mostrara su rostro en fotografías y videos, lo cual, dada la naturaleza del caso, busca preservar su dignidad personal durante la investigación. Según los participantes directos en el proceso y la grabación de video publicada, durante la audiencia, la acusada confirmó su servicio militar. Señaló que trabajaba en una unidad militar como "operadora de línea" y también confirmó que su tarjeta de identificación militar indica que es una militar cuyo servicio se centra en las "finanzas". Al ser preguntada sobre el arma que le entregaron, respondió que era un "rifle de asalto Kalashnikov", pero se negó a especificar el modelo y el calibre, señalando que "los números no son míos". También informó que fue desmovilizada "por circunstancias familiares", pero no proporcionó más detalles sobre los motivos. ¿Qué precedió a este evento? El 18 de junio, se supo que empleados de la Oficina Estatal de Investigación habían descubierto un plan para que una diputada, miembro del Consejo Regional de Dnipropetrovsk, realizara un servicio militar ficticio. Según las grabaciones de audio publicadas y otros materiales de la investigación, en conversaciones, representantes de las estructuras militares discutieron un plan para que realizara el servicio militar como una "combatiente", que debía ser "presentada" en la sala durante los procedimientos formales y luego "liberada", así como para proporcionarle la condición ficticia adecuada para recibir pagos y crear una imagen positiva. En uno de los mensajes de voz, el subcomandante de la unidad militar se dirigió al director del centro de entrenamiento para solicitarle que "resolviera el problema" con la diputada local. Según él, esta persona debía "solicitar el ingreso en la unidad militar", presentarse en ella y luego ser "liberada" sin realizar un servicio militar real. En otra conversación, la propia persona se jacta ante su madre de haberse hecho soldado por conveniencia y prestigio, y también afirma que sirve como operadora de vehículos aéreos no tripulados en una trinchera simulada. Añadió que completó el "entrenamiento", al que calificó de "un lugar terrible", en tan solo dos horas, lo que deja entrever su actitud superficial hacia el entrenamiento militar. Toda esta situación, con la exposición de un servicio ficticio y posibles abusos, está siendo investigada activamente por las fuerzas del orden. La investigación sigue en curso y, por ahora, es solo el primer paso de una lucha más amplia contra la corrupción y el fraude en el ejército, que siguen siendo uno de los problemas más graves en Ucrania.