Misiles y drones sin piloto rusos vuelven a atacar Kremenchuk: víctimas y daños

La noche del 15 de junio, Kremenchuk, uno de los mayores centros industriales y de transporte de la provincia de Poltava, volvió a estar bajo ataque por parte de los ocupantes rusos. Según la información de las autoridades locales, las fuerzas militares y de rescate informan sobre un bombardeo masivo y coordinado, realizado con misiles y drones kamikaze. Este es un episodio más de escalada de la agresión, que ya se ha vuelto habitual para la población local, que enfrenta diariamente miedo y destrucción. De acuerdo con los informes de la Administración Militar de la Provincia de Poltava, así como fuentes oficiales de las Fuerzas Aeroespaciales de las Fuerzas Armadas de Ucrania y agencias de información independientes como Radio Svoboda, durante el último ataque se registraron impactos directos y caída de escombros en objetos clave de infraestructura crítica, en particular en instalaciones de suministro de energía. También resultaron dañadas zonas abiertas de la ciudad. Los equipos de rescate, conocidos como el Servicio Estatal de Emergencias, ya han comenzado a liquidar las consecuencias del ataque, trabajando con el fin de minimizar los daños y localizar a los afectados. Según reportan los medios de comunicación locales, como resultado del incidente una persona sufrió heridas de gravedad moderada, actualmente se encuentra en un centro médico y su estado es estable. Al mismo tiempo, las fuentes oficiales afirman que se lograron evitar daños significativos en magnitud gracias a las medidas de protección aérea a tiempo y a las alertas vocales a los residentes. Desde la noche, las fuerzas militares reportan el paso de objetivos en el cielo sobre Kremenchuk, lo que indica un trabajo activo de los sistemas de defensa aérea. Según datos obtenidos por Radio Svoboda y recursos informativos locales, en unos pocos minutos se escucharon alrededor de 40 explosiones; todo esto evidencia la magnitud y la naturaleza deliberada de las acciones del enemigo. Los sonidos y los testimonios de testigos confirman que los rusos usaron un ataque combinado de alta intensidad. Recordemos que en la noche del 15 de junio, los ocupantes llevaron a cabo un ataque masivo similar contra Kremenchuk, usando misiles y vehículos aéreos no tripulados (VAN). En esta ocasión, dirigieron sus ataques contra la infraestructura energética y agrícola, vital para la supervivencia de la ciudad y la región. Esto forma parte de la lucha contra la resistencia ucraniana y del intento de intimidación a la población, que ya lleva tres años bajo la presión de la destrucción y la guerra. Mientras la situación sigue siendo tensa, los residentes de Kremenchuk y de los distritos circundantes continúan esperando que pase la alarma y evalúan con cautela la magnitud de los daños. Los servicios oficiales no descartan la posibilidad de nuevos ataques y llaman a extremar las medidas de seguridad. Este ataque nocturno fue un recordatorio más de que la guerra en la región continúa y sus consecuencias se sienten a diario.