Aumento del conflicto en Oriente Medio: aviones de combate israelíes atacaron instalaciones con misiles en Irán, aumenta la tensión
Según informes del Ejército de Defensa de Israel (Tzahal), en las últimas horas las fuerzas aéreas israelíes llevaron a cabo una serie de bombardeos contra complejos de lanzamiento de misiles en la costa oeste de Irán. Esto representa una nueva etapa en la escalada de tensiones en la región, que lleva varias semanas en un estado de alta tensión debido a las acciones continuas en los frentes entre Israel e Irán y sus aliados. De acuerdo con datos oficiales de Tzahal, en su canal de Telegram, los representantes del ejército enfatizaron que “en las últimas horas, aproximadamente 15 aviones de combate de la Fuerza Aérea de Israel realizaron una serie de golpes selectivos en instalaciones de lanzamiento de misiles en el oeste de Irán”. Los Guardias de Frontera informaron que estas operaciones estaban dirigidas específicamente a destruir objetos clave y posibles fuentes de ataques con misiles, así como a prevenir una posible escalada del conflicto. Cabe recordar que, la noche del 16 de junio, las fuerzas militares israelíes informaron haber llevado a cabo ataques en objetos en el centro de Irán, incluyendo Teherán. En esas mismas horas, las fuerzas israelíes señalaron que llevaron a cabo acciones dirigidas contra misiles "tierra-tierra" utilizados para lanzar ataques en dirección a Israel, con el fin de neutralizar amenazas potenciales. El antecedente del conflicto tiene raíces profundas. En la noche del 13 de junio, Israel realizó una serie de ataques con misiles en instalaciones en la capital iraní y alrededores. La operación militar fue justificada como preventiva: las fuerzas israelíes buscaban golpear objetivos nucleares y militares que podrían convertirse en potenciales blancos para las fuerzas iraníes. Como resultado de estos bombardeos, fueron eliminados altos funcionarios y científicos, incluyendo al comandante del Cuerpo de Guardias de la Revolución Islámica, General de Brigada Hossein Salami, al Jefe de Estado Mayor Hatam al-Anbia, General de Brigada Gholamali Rashed, y al comandante principal de las Fuerzas Armadas de Irán, Mohammad Bagheri. Además, según información oficial, al menos seis científicos nucleares perdieron la vida. Estas acciones provocaron declaraciones enérgicas por parte de altos funcionarios iraníes. El ministro de Relaciones Exteriores de Irán anunció que tras estos ataques, cualquier negociación con EE.UU. sobre el programa nuclear carece de sentido. Al mismo tiempo, el presidente de EE. UU., Donald Trump, hizo un llamado a Irán para que negocie un nuevo acuerdo nuclear, advirtiendo que el tiempo para compromisos es limitado. Al día siguiente, en la noche del 14 de junio, las fuerzas iraníes respondieron con disparos de misiles balísticos en territorio israelí. Según informes, esos ataques con misiles causaron una muerte y más de 50 personas resultaron heridas. El mismo día, 15 de junio, Irán continuó la escalada, lanzando otra gran ofensiva de misiles contra territorio israelí. Según la parte israelí, al menos tres israelíes murieron, más de 200 resultaron heridos y alrededor de 35 personas todavía están desaparecidas. De particular preocupación es la información sobre pérdidas humanas entre ciudadanos ucranianos en este conflicto. Según datos preliminares, como resultado de los ataques con misiles en ambos lados en aeropuertos y otros objetivos en territorio israelí, han muerto cinco ucranianos, entre ellos tres niños menores de edad. Esto indica que la tensión sigue aumentando y que la región está cada vez más en riesgo de una crisis a gran escala, que podría tener graves repercusiones para la seguridad internacional. Analistas y círculos diplomáticos llaman a la moderación y al diálogo. Sin embargo, la guerra en Oriente Medio continúa intensificándose, y la escalada de la violencia amenaza con convertirse en una crisis más amplia que podría afectar la situación política y de seguridad global.