El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Andriy Sibiga, reaccionó duramente a la declaración del presidente ruso Vladimir Putin, interpretada con un sentido dudoso y con matices cínicos, en la que afirmaba que “donde pisa un pie del ocupante ruso, todo es nuestro”
El diplomático ucraniano calificó esta declaración como “una de las palabras locas” del líder ruso y subrayó que cualquier manifestación de la invasión militar rusa solo traerá muerte, destrucción y sufrimiento indescriptible para las personas. En una publicación en la red social X (antes Twitter), Sibiga destacó que cualquier paso de los soldados rusos en territorio ucraniano conduce a destrucción y tragedia, y no a alguna “fusión” imaginada de territorios. “Donde sea que pise el soldado ruso, en última instancia trae consigo solo muerte, destrucción y devastación”, escribió el ministro. Agregó que el Kremlin poco le importa el destino de los soldados rusos o de sus piernas, las cuales ya están siendo destruidas en el campo de batalla por los drones ucranianos. Según Sibiga, Putin se ha convertido en un asesino en masa de su propio pueblo: casi un millón de soldados rusos han sido eliminados o heridos en el absurdo y sangriento conflicto en Ucrania, sin haber alcanzado ningún objetivo estratégico. “Un millón de soldados — dos millones de pies”, enfatizó el diplomático. En general, Sibiga resaltó que los cínicos cargos del presidente de la Federación Rusa demuestran una total falta de respeto por los esfuerzos mundiales por lograr la paz. “Mientras el mundo entero pide una inmediata cesación del fuego y el fin de la masacre, el régimen ruso continúa tejiendo planes para nuevas ocupaciones de territorios ucranianos y un mayor exterminio de los civiles de Ucrania”, subrayó el diplomático ucraniano. Según sus palabras, Putin está dedicado a enviar a sus soldados a nuevas invasiones, mientras destruye la economía de Rusia desde adentro — las sanciones y el aislamiento agotan cada vez más al país desde dentro. “Toda esta retórica declarativa y las amenazas acerca de enviar pies rusos a conquistar tierras ajenas no hacen más que distraer la atención de los problemas fundamentales del desarrollo interno de Rusia y de los fracasos en su política exterior”, señaló Sibiga. Para él, el objetivo de esto no es solo fortalecer el papel del presidente en la propaganda interna, sino también encubrir su propia gestión fallida, la historia de fracasos y crisis, basadas en ilusorios “ ideales nacionales”. El único camino accesible para forzar a Rusia a la paz, está convencido el ministro ucraniano, es fortalecer las capacidades defensivas de Ucrania y aplicar las sanciones económicas más estrictas contra Moscú. “Solo así se puede hacer que Rusia reevalúe sus ambiciones y vuelva a la mesa de negociaciones en condiciones justas”, subrayó Sibiga. Finalmente, añadió que los mensajes como el de Putin sobre la “unidad de los pueblos” y la “historia común” son solo intentos de esconder la debilidad interna y el fracaso estratégico de la administración del Kremlin, que desde hace tiempo carece de una estrategia clara y continúa una guerra sin rumbo ni objetivos claros, destructiva y sin sentido. Recordemos que el 20 de junio, el presidente ruso Vladimir Putin expresó en una cumbre que los pueblos ruso y ucraniano “son un solo pueblo”, y que donde “pisa un pie del ocupante ruso”, todo se convierte, supuestamente, en “nuestro”. Esta declaración generó otra ola de críticas duras en la comunidad internacional, en particular en Ucrania, que insiste en que la agresión rusa viola el derecho internacional y constituye una invasión armada, no una “unidad de pueblos”. Sin embargo, para Kiev y la mayoría de los países del mundo, es importante reiterar que Moscú, a través de su agresión, destruye no solo las ciudades de Ucrania, sino también la seguridad global, y que la respuesta debe ser una mayor voluntad de apoyar a Ucrania y tomar medidas económicas contra Rusia.