Según la información publicada por la agencia Reuters, el enviado especial del presidente de los Estados Unidos para Ucrania, Kit Kellogg, se está preparando para un viaje importante a Bielorrusia, que, según fuentes no oficiales, tendrá lugar en los próximos días

El principal objetivo de la visita es reunirse con el presidente autoproclamado Aleksandr Lukashenko. Aunque actualmente no hay confirmación oficial de esta información, las fuentes de la agencia afirman que existen tales planes y que están en la fase final de coordinación. De acuerdo con dos interlocutores anónimos, el orden del día exacto de esta reunión aún no ha sido establecido, pero Kit Kellogg, en conversaciones privadas, insinuó que esta visita podría ser un paso importante en el camino para establecer un diálogo amplio y negociaciones para resolver el conflicto en Ucrania. Los servicios de información del Ministerio de Relaciones Exteriores de Estados Unidos y la representación diplomática de Bielorrusia en Washington no han proporcionado comentarios a las consultas, lo que una vez más subraya la delicada naturaleza diplomática de la situación. Cabe señalar que la planificación de visitas de alto nivel como esta requiere largas y complejas negociaciones a nivel superior, y no se descarta que el viaje pueda ser cancelado o aplazado a un momento más conveniente para las partes. En cualquier caso, si Kit Kellogg realiza esta reunión con Lukashenko, será un precedente histórico, ya que en los últimos años esta visita probablemente se considerará en análisis como uno de los contactos de más alto nivel entre Estados Unidos y los regímenes autoritarios en el espacio post-soviético. Por cierto, en 2020, durante la administración del entonces presidente Donald Trump, el entonces Secretario de Estado Mike Pompeo realizó una visita a Bielorrusia. Fue uno de los viajes de mayor nivel de EE. UU. a ese país en dos décadas, cuya principal finalidad fue mejorar las relaciones bipolares entre Minsk y Washington, que en ese momento se encontraban en profunda crisis. Entonces, la visita formó parte de los esfuerzos de la administración Trump por promover la pacificación en una región al borde de una escalada de conflictos. Por otro lado, cabe destacar que el papel de Bielorrusia en el contexto del conflicto entre Ucrania y Rusia es especialmente sensible y delicado. El 12 de junio, hace unos días, Kit Kellogg, en conversaciones privadas con representantes de la administración de EE. UU., subrayó la importancia de los esfuerzos del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky para buscar una resolución pacífica del conflicto. Esto refleja la intención de Washington de intensificar los pasos diplomáticos destinados a lograr la paz y la estabilidad en la región en medio de rápidos cambios geopolíticos. Por lo tanto, el próximo viaje de Kit Kellogg a Bielorrusia se considera por los analistas como un posible elemento clave en la búsqueda de vías diplomáticas para resolver la crisis que lleva varios años en curso. Al mismo tiempo, aún hay muchas incógnitas sobre qué tan preparado está Lukashenko para un diálogo constructivo y cuáles son los objetivos que persiguen Estados Unidos en este contexto. Las expectativas y las especulaciones sobre las próximas negociaciones aumentan, ya que esta visita tiene el potencial de replantear el papel de Bielorrusia en la política global y cambiar el formato de futuras relaciones diplomáticas en la región.