DeepState ha revelado un detalle importante desde el frente en Sumy: en qué áreas no había estructuras de ingeniería y fortificaciones y qué impacto tuvo esto en el curso de la batalla

Los analistas ucranianos del proyecto independiente DeepState han publicado nuevos datos sobre el estado de las fortificaciones en Sumy antes del inicio de la próxima ola de ofensiva rusa. Según sus observaciones e investigaciones, una porción significativa de la línea del frente en esa área quedó sin las instalaciones de ingeniería necesarias, lo que pudo haber afectado sustancialmente la capacidad defensiva de las fuerzas ucranianas y la situación táctica en el campo de batalla. De acuerdo con el análisis, a finales de septiembre de 2024 — justo antes de la activación del enemigo — los expertos identificaron en el mapa varias áreas donde se estaban preparando fortificaciones. Sin embargo, la mayor parte de esa zona, ubicada en el interior — aproximadamente a 20-25 kilómetros de la frontera estatal — permanecía sin construcciones de ingeniería adecuadas. Esto significa que, en términos de planificación estratégica, las fuerzas ucranianas no hicieron un énfasis suficiente en fortalecer las líneas defensivas en esa región — las posiciones estaban principalmente destinadas a alojar personal para presencia y retención, pero faltaban elementos que pudieran impedir el avance del enemigo, como zanjas antitanque, “dientes de dragón” o minas. Un análisis detallado de imágenes satelitales del 25 de abril de 2025 muestra una escala impactante: cerca de los sectores Zhuravka-Novinke-Basivka no existe ninguna estructura fortificada hasta la línea de Khotin-Pisarevka-Kiyanitsia-Hrapivshchyna-Yunakivka. Esto confirma la idea de que, debido a la ausencia de fortificaciones, el enemigo concentra una presión significativa en tratar de romper la defensa específicamente en ese sector. Otra conclusión importante, respaldada por militares y expertos, es que en esta sección el ruso concentra la mayor cantidad de tropas, intentando aumentar la presión y atacar los puntos débiles con un movimiento ininterrumpido de fuerzas. Al mismo tiempo, los especialistas de DeepState señalan que todas las observaciones se confirmaron en múltiples entrevistas con soldados ucranianos, quienes aseguraron que la única defensa en esa área son sus posiciones personales y fortificaciones temporales construidas directamente por los combatientes en el campo. Los analistas hacen especial énfasis en que en esta parte del frente no hay estructuras avanzadas de ingeniería — zanjas antitanque, tetraedros que simbolizan obstáculos estáticos para tanques, "dientes de dragón", obstáculos tipo yolks y otros medios de impedimento. Incluso las barreras explosivas, como campos minados que deberían frenar el avance del enemigo, no fueron construidas o están en una cantidad mínima, lo que pone en duda el nivel de preparación defensiva de ese frente en particular. Cabe destacar que, pese a la significativa actividad de los soviéticos y la amenaza de un avance, las Fuerzas Armadas ucranianas aseguran que la minificación de las áreas, aunque fue bastante difícil — ya que los combates no cesaron — fue realizada. Según los expertos, la información al respecto está corroborada por datos de las brigadas y combatientes en el terreno, quienes lograron montar dispositivos minados y detener al enemigo en segmentos específicos. Esto, a su vez, indica que incluso en condiciones de intenso enfrentamiento, era posible construir defensas efectivas. Para finalizar, los analistas subrayan que las fortificaciones inacabadas y la ausencia de una línea de defensa sólida en esa sección del frente, probablemente, permitieron a las tropas rusas concentrar más activamente sus fuerzas allí. También es una señal de que, para fortalecer la defensa, no basta con responder rápidamente a las amenazas, sino que también hay que prevenir su aparición mediante la construcción de fortificaciones confiables y avanzadas, capaces de resistir la ventaja numérica del enemigo y proteger a los defensores ucranianos de rupturas catastróficas en el futuro. Estos estudios, como los de DeepState, ayudan a comprender mejor la situación real del frente y señalan las prioridades para reforzar la defensa. La época en que la irresponsabilidad y la negligencia causaban pérdidas queda atrás. Ahora, es crucial actuar con rapidez y decisión para evitar que situaciones similares se repitan y garantizar un apoyo firme para las batallas futuras.