Зеленський reaccionó ante la felicitación de Estados Unidos con motivo del Día de Rusia con disgusto, subrayando un hecho desagradable
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, expresó su enfado y descontento en relación con las felicitaciones por parte de los Estados Unidos de América con motivo del Día de Rusia. Su indignación fue especialmente provocada por la felicitación realizada por el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, a la cual el líder ucraniano calificó como «hecho desagradable». Esto ocurrió durante una conversación con periodistas, a los cuales se negó la participación de representantes de «Ukrainska Pravda», aunque la información fue difundida al público por fuentes, en particular por Public Broadcasting. En directo, Volodymyr Zelensky calificó este incidente como un «hecho desagradable». Según sus palabras, «felicitar a Rusia con su propio Día de la Independencia es una práctica reciente e inaceptable, especialmente en el contexto actual». Subrayó que ese día es «el Día de la Independencia de Rusia», y que Moscú pretende reducir a Ucrania a un estado no independiente, mientras que Ucrania busca defender estos valores y esta libertad. Zelensky enfatizó que el objetivo principal de la invasión rusa es precisamente «preservar y proteger la independencia de Ucrania», y que cualquier felicitación formal o informal al agresor es vista como una muestra de falta de respeto y puede socavar los esfuerzos del pueblo ucraniano. El jefe del Estado agregó que percibe las felicitaciones con desprecio, no solo por su simbolismo, sino también por su contenido. «No lo ocultaré: cuando otros países saludan a un país agresor en su día nacional, esto resulta especialmente doloroso. Es muy difícil de digerir, cuando nuestros socios estratégicos, en particular Estados Unidos, con quienes buscamos una estrecha cooperación en temas de seguridad y apoyo a la soberanía, felicitan a la país agresor», señaló Zelensky. ¿Qué precedió a esta posición? El 12 de junio, el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, hizo una declaración sonada al felicitar a los ciudadanos de Rusia por su fiesta nacional: el Día de Rusia. En su mensaje, señaló que EE. UU. busca un diálogo constructivo con Moscú con el fin de «alcanzar una paz sólida entre Rusia y Ucrania», y destacó que «los países en conflicto deben trabajar para detener las hostilidades». Asimismo, Rubio enfatizó que EE. UU. «permanece comprometido con apoyar al pueblo ruso y desea construir un futuro brillante junto a él», lo que fue recibido con entusiasmo en círculos del Kremlin y generó críticas por parte de la diplomacia ucraniana. Cabe señalar que la reacción del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania no tardó en llegar: el ministro de Exteriores, Andriy Pyvovarov, también expresó su opinión, declarando que fue «desagradable» leer felicitaciones de algunos países por el Día de Rusia, ya que tal comportamiento puede interpretarse como un gesto poco amistoso o una confirmación directa del apoyo de la política del Kremlin hacia Ucrania. De este modo, en Kyiv no ocultan su decepción por los intentos de algunos líderes mundiales de apoyar a Rusia en sus celebraciones, mientras Ucrania continúa luchando por su futuro independiente y no tiene intención de permitir que el agresor siembre discordia, incluso en estos difíciles tiempos de guerra.